Y tras la cita europea ante el Milan... el Barcelona. Retoma el Betis la Liga visitando el Camp Nou con el objetivo de conseguir un triunfo con el que cortar, definitivamente, la mala racha. Una victoria que le permita coger confianza, marcharse al parón con cierta tranquilidad y, sobre todo, no alejarse más de las posiciones europeas, que es donde el conjunto verdiblanco tendría que estar en estos momentos por los mimbres que tiene.

El escenario y el rival, a priori, no parecen ser idóneos para el equipo de Heliópolis, pero éste ya ha dejado claro muchas veces que en este tipo de encuentros es capaz de dar la sorpresa. Así lo demostró ya la temporada pasada en la visita al Santiago Bernabéu, y en esta campaña Quique Setién tiene todavía más argumentos de calidad a su disposición para buscarle las cosquillas al todopoderoso Barcelona, para competirle al máximo ofreciendo una buena imagen y así tener opciones de ganar, ¿por qué, no? Ganar. Exigencia y ambición, siempre.

Los verdiblancos deben aprovechar los espacios que deja el Barça atrás para hacerle daño con velocidad y verticalidad

Será un encuentro en el que se midan dos conjuntos a los que les gusta tener el balón en su poder, por lo que se presenta un interesante duelo táctico entre Setién y Ernesto Valverde. Para esta cita, el preparador cántabro tiene a todos sus hombres disponibles a excepción de Javi García y Francis, en la enfermería, por lo que continuará con las rotaciones tan habituales cada jornada. Pau López seguiría en la portería, Barragán entraría en el costado derecho, con Mandi, Bartra y Sidnei, que volvería tras descansar ante el Milan, como centrales, y Júnior en el costado izquierdo. William Carvalho estaría como pivote junto a Guardado y probablemente Lo Celso, y arriba, a priori, estarían Inui y Loren, con opciones también para Sergio León.

Joaquín y Tello, en principio, descansarían tras salir de inicio el pasado jueves y estarían en el banquillo, aunque no hay que descartar que alguno pueda salir de inicio para buscar los espacios que el cuadro azulgrana pueda dejar. Esos huecos que deberá aprovechar el Betis para hacerle daño al Barça, que siempre suele conceder ocasiones claras a sus rivales. Además, tendrán que tener los verdiblancos esa lucidez de cara a gol a la que alude siempre Setién y motrar solidez en defensa para frenar a tan potente adversario. La batalla en el centro del campo por controlar el balón se antoja fundamental para un partido en el que el cuadro de Heliópolis busca dar un golpe en la mesa.

La batalla en el centro del campo por tener el balón está servida entre dos equipos a los que le gusta tener la posesión

Enfrente tendrá el Betis a un conjunto barcelonista en el que la principal duda es saber si Messi acabará jugando, estará en el banquillo o será el descarte de los 19 hombres citados por Valverde, que también recupera a Umtiti, dejando fuera de la lista por decisión técnica a Dembele, mientras que Coutinho será baja por una lesión muscular. Así, en su lugar podría tener una nueva oportunidad el brasileño Malcom, autor del gol azulgrana ante el Inter (1-1), con lo que formaría tripleta atacante con Messi, siempre que sea titular, y Luis Suárez, quien atraviesa por un excelente momento de forma.

El uruguayo, fundamental con dos goles, en el último triunfo del Barça en Vallecas (2-3), tendrá que ser muy vigilado de cerca por los centrales béticos, sobre todo por Bartra, que regresa a su casa con una gran confianza después del sensacional encuentro que cuajó ante el Milan tras dos actuaciones discretas en los últimos dos partidos ligueros. El resto del once seguramente será el habitual, con la única excepción de la posible entrada de Arturo Vidal para reforzar la medular y dar descanso a Rakitic.

La solidez en defensa es otro punto en el que el equipo bético deberá ser fuerte para frenar a Luis Suárez y Messi, si juega

Mateu Lahoz será el encargado de dirigir una contienda entre dos equipos que atraviesan por un momento de forma en la Liga muy distintos. El Barça intentará lograr una victoria para mantener o alargar su distancia de tres puntos en la tabla sobre el Espanyol y el Betis, para adquirir una inyección de moral importante y, sobre todo, para volver a la senda del triunfo y seguir creciendo. El deseo de lo ¿imposible? Sentir, luchar, ganar...