El Betis Deportivo quiere más. Ni el tropiezo en Algeciras ni la mala fortuna de ponerse perdiendo en la primera llegada con peligro del Atlético Sanluqueño, tras un penalti de Luis Martínez, frenaron a los de Manel Ruano, que reaccionaron a lo grande. Rodri, muy implicado todo el partido, y la sociedad formada entre Raúl y Mizzian le dieron la vuelta al marcador para que los verdiblancos celebrasen con sus aficionados la primera victoria en la fase de ascenso a Segunda.

No se lo puso fácil el Atlético Sanluqueño de Pedro Buenaventura, que se estrenó en un banquillo más que conocido. Replegado en campo propio y con la idea de buscar el contragolpe, los gaditanos defendieron con orden y dificultaron el juego de ataque bético. Monopolizando el balón, pero con escasa profundidad, el Betis Deportivo apenas inquietó la meta del panameño Marcos Allen, que apenas tuvo que intervenir al cuarto de hora, tras una acción por la banda derecha entre Fran Delgado y Rodri. El de Talayuela también probaría fortuna con un disparo desde la frontal, que se marchó a córner tras desviarlo un defensa. Del Sanluqueño apenas hubo noticias, salvo una buena contra antes del descanso que finalizó Bautista con un remate desde la frontal, al que respondió bien Rebollo.

La tónica no cambió tras el intermedio. El balón seguía siendo del filial, pero a los de Ruano, que reclamaron un posible penalti por empujón sobre Raúl, les costaba generar ocasiones. El panorama se pondría incluso más oscuro en el 70', cuando en la única llegada de peligro visitante del segundo tiempo, Arasa remató desde dentro del área y Luis Martínez detuvo el lanzamiento con el brazo extendido en su intento de despeje. Edu Oriol, con un fuerte disparo raso, superó a Rebollo y el partido se le ponía cuesta arriba al filial.

Ruano reaccionó de inmediato y puso en el campo a Mizzian y Chema Núñez, en busca de una remontada para la que sólo quedaban 20 minutos. Y el filial, con la fe de siempre, la encontró. Primero con el empate, apenas cuatro minutos después del 0-1, tras una acción individual de Rodri y su centro al segiunfo palo acabó introduciéndose en la portería visitante; dos minutos después, sería Raúl quien lograse el 2-1 con un perfecto remate de primeras, tras una combinación entre el propio Raúl y Mizzian, que le puso un balón medido. Y a falta de un minuto, los mismos protagonistas intercambiaron los papeles para que el hispano-marroquí, tras dejada de cabeza de su compañero, enganchase un fuerte disparo con la derecha que se coló junto al poste izquierdo de Allen. El filial ya había hecho lo más difícil e incluso pudo lograr el cuarto tanto con un contragolpe de Chema Núñez, que no puso superar al meta panameño en el mano a mano,