Sin alarmismo, sin urgencias, pero sí con cierta necesidad. Así acude el Betis hoy a Mendizorroza, donde pretende cerrar esa herida abierta que supuso el inesperado 0-3 del estreno liguero ante el Levante. No se conoce en el fútbol mejor medicina que los puntos y eso buscará hoy este equipo ahormado por Quique Setién, que ha insistido en su mensaje para que nadie en el vestuario renuncie a su idea a las primeras de cambio. Eso sí, el fútbol tiene escasa memoria, así que bien haría este Betis en salir victorioso de Mendizorroza, un estadio de grato recuerdo para el entrenador cántabro y los suyos.

Y es que hace apenas unos meses allí iniciaron los verdiblancos su mejor racha de la temporada –con siete victorias en ocho encuentros– que les aupó a una plaza directa para la Liga Europa y certificó ese paso adelante que ya se intuyó en verano con una planificación más coherente que la de años anteriores. Ahora, y a la espera de que el mercado se cierre con alguna incorporación más de nivel, el propio Setién admite que el equipo está preparado para seguir creciendo, lo que pasa necesariamente por acumular puntos al casillero.

Alineaciones probables

No tiene previsto el cántabro cambiar demasiado de lo que según él funcionó casi a la perfección ante el Levante. Asentado ya el esquema de tres centrales y dos carrileros, los únicos movimientos en el once serían cambios de piezas para ajustarse mejor a la exigencia del rival. La entrada de Inui, para buscar un mayor dinamismo en la zona ofensiva, o la titularidad de Barragán por Francis se antoja como posibilidades reales para intentar afinar a un equipo que mostró virtudes ante el Levante pero también algún defecto que debe corregir.

Si la presión tras pérdida en campo contrario se ha perfeccionado durante el verano, como se apreció en el estreno liguero, bien hará el Betis en minimizar esos errores con el balón, sobre todo en zonas peligrosas. El Alavés, un equipo con las ideas muy claras desde la llegada de Abelardo a su banquillo, tratará de hacer daño al contragolpe, precisamente uno de los puntos débiles ante el Levante. El técnico vitoriano incluso pretende que su equipo comparezca con un punto más de agresividad que el exhibido en el Camp Nou, con lo que el Betis deberá cuidar con mimo la pelota.

El estilo de posesión verdiblanco debe servir para llevar el peso del partido en Mendizorroza, pero sin caer en el error de un exceso de juego horizontal y sin profundidad en el que se cayó por momentos en la primera jornada. La potencia de Júnior y las incorporaciones medidas de Barragán deben abrir el campo para que luego fluya el juego por dentro de Canales, Guardado o el propio Inui, si finalmente es el elegido en vez de Boudebouz.

En la delantera continuará Loren, pese a quedarse sin marcar en el estreno. La magnífica eficacia que mostró en la pretemporada le hace acreedor de una nueva oportunidad, aunque los técnicos también desean que la responsabilidad de los goles no sólo sea del delantero sino también de la segunda línea.Si la ilusión casi convertida en euforia del verano quedó enfriada por el varapalo ante el Levante, Setién y los suyos quieren recuperar la mejor versión ante el Alavés de Abelardo. Para dejar en un accidente esa derrota de la primera jornada, la mejor medicina es una victoria en Mendizorroza que sume los primeros tres puntos de la temporada.