La figura de Quique Setién no deja indiferentes. Así ha iniciado el entrenador su etapa en el Barcelona y así lo fue durante los dos años en los que dirigió al Betis. El domingo regresa al Benito Villamarín, donde lo espera esa afición con la que tuvo sus tira y afloja, sobre todo en un último año en el que su mensaje agrandó las distancias con buena parte de los béticos y los paupérrimos resultados de 2019 le acabaron por dar la puntilla.

Si su primera campaña acabó con la satisfacción de la clasificación europea, lo que permitió dejar atrás la dolorosa encajada frente al Cádiz en la Copa del Rey, desde ese mismo final de temporada Setién comenzó a marcar distancias con los aficionados con una serie de declaraciones que debilitó su relación con la grada.

Las eliminaciones ante Rennes y Valencia y la pronunciada caída en la Liga acabaron por desgastar al técnico, que vivió picos de felicidad con sus triunfos en Milán o Barcelona, oasis de una temporada que finalizó con su adiós al Betis.

El Betis y Europa

Nada más sellar la clasificación para la Liga Europa –con esa racha histórica de seis victorias seguidas–, Setién ya pisó el primer charco con unas palabras que no sentaron bien a los béticos.

"Hay cosas que desconozco y me preocupan. Quiero hacer un buen trabajo y dar continuidad al proyecto. Me preocupa la historia de este club, que otras veces que ha jugado en Europa ha tenido en la Liga un rendimiento muy pobre. No sé el equipo que podremos confeccionar. No sé si este club está preparado para asumir esas tres competiciones con la exigencia que tiene el club", indicó Setién.

El 0-3 del Levante

Tras un verano tranquilo y con fichajes como Pau López, Canales, William Carvalho, Sidnei o Inui –Lo Celso se incorporó el último día de mercado–, el Betis comenzó la Liga encajando un 0-3 con el Levante, que luego sentó peor por las propias declaraciones del técnico cántabro.

"Hemos generado 25 disparos a portería", aseguró el técnico tras un partido en el que Betis apenas llegó a la portería rival con claridad. "Ellos no han dado tres pases seguidos aunque luego han finalizado bien", añadió Setién.

Insulto a la grada

Con apenas un mes de competición, el Betis igualó 2-2 con el Athletic en Heliópolis, aunque ese partido quedó en el recuerdo por el insulto que Setién lanzó a los béticos cuando éstos pitaron a Francis al entender que era un capricho del técnico".

"Claro que me he arrepentido. No soy un hombre de reacciones tan espontáneas, pero en ese momento fue lo que me salió, pero por el chaval (Francis), porque lo necesitábamos para ganar el partido, no porque yo esté reclamando a la gente", indicó Setién después en una entrevista en este periódico.

De Milán a Getafe

Tras vencer al Milan en San Siro en la Liga Europa, en un triunfo celebrado por todo lo alto, el Betis cayó tres días después en Getafe. Y ahí aparecieron de nuevo las críticas al técnico por sus excusas.

"No hemos tenido tiempo para preparar el partido tan exigente como éste, hemos estado condiciocionados por el partido del jueves. Si el partido hubiera sido esta noche en vez de esta mañana y tener que madrugar.... Desde el principio he visto que nos faltaba algo", indicó Setién.

Quique Setién, ayer durante su conferencia de prensa.

El rendimiento de Bartra

Tampoco la plantilla se libró de mensajes erróneos que provocaron malestar, además, en los aficionados. "Que esté aquí no es un buen síntoma para él, sí lo es para nosotros, pero no para él. Estando en el Barcelona y estando en el Dortmund, muchas veces le digo que algo no estarás haciendo bien para estar aquí en el Betis, un equipo que en teoría es menor que los otros dos en los que has estado", dijo Setién sobre Bartra, en unas palabras que luego debió matizar.

La afición del Huesca

El Betis comenzó 2019 con una derrota en Huesca, donde ya ofreció síntomas de lo que sucedería después, y las excusas de Setién volvieron a aparecer para enfado de los béticos. "El otro día fuimos a Huesca, y no digo que el segundo gol lo metiera El Alcoraz, pero el apoyo y el ánimo que le dieron a su equipo durante los 90 minutos ayuda mucho", expuso el cántabro. 6.135 espectadores fue la cifra oficial de aquel encuentro.

La derrota europea

Tras caer eliminado ante el Rennes con un 1-3 en el Villamarín, Setién volvió a buscar explicaciones difusas para sus decisiones desacertadas. "Podíamos haber incorporado a futbolistas en las bandas menos ofensivos pero sería renunciar a nuestra manera de entender las cosas. Sabíamos dónde son buenos arriba pero aún sabiéndolo no es fácil pararlos", indicó el cántabro tras colocar a Joaquín y Guardado de carrileros para defender a Sarr y Niang, las bandas del rival.

Del Leganés al Getafe

Tras perder por 3-0 ante el Leganés, Setién volvió a generar polémica con sus palabras. "No le importa tener que jugar bien. Hace cuatro cosas espectacularmente bien con jugadores apropiados para ello. Pero si mañana les pides que jueguen como nosotros seguramente les va a costar", indicó el técnico,quien ya esceneficaría el divorcio con los béticos tras la derrota ante el Getafe en Heliópolis cuando mayor parte de la afición entonó el "¡Quique, veta ya!". La posterior mala racha de resultados, con sólo dos triunfos en los siguientes diez partidos, lo acabó condenando.