Profesorado y alumnado del instituto Sancti Petri de San Fernando han leído con motivo del 8M un poema en el que cada uno ha reflejado una visión distinta y personal de las mujeres. "Hay una mujer que pasea el mundo con un vestido azul y margaritas blancas", decía una docente. "Hay una mujer que ora por las noches, y ahora ora por ti, porque para ella todos son familia", proseguía un alumno. "Hay una mujer que vive y busca las cosas bellas, crea música y poemas. Hay una mujer que siente", añadía otra profesora. "Una mujer piensa, reflexiona, rebusca en los cajones de su mente, inventa lo necesario, provoca el avance del mundo", pronunciaba un profesor.

La cita por el Día Internacional de la Mujer ha congregado a los alumnos del centro en los pasillos techados de la zona de patios, ante la lluvia que caía. Asistían la alcaldesa, Patricia Cavada, la concejala de Mujer, Virginia Barrera, y la concejala de Educación, María José Foncubierta, que recibían la bienvenida de la vicedirectora, Laura Sáez, que ha resumido con sus palabras qué se reivindica el 8-M, qué se trabaja en el instituto con los alumnos y la realidad social en materia de igualdad, además de mencionar el pasado.

Sáez, que enseña historia, admitía la escasez de referencias de mujeres en la historia, al menos visibilizadas. Poco a poco eso cambio, y se intenta que se conozcan y que día a día haya cada vez más féminas a las que admirar. "Hay que celebrar la visibilidad", ha comentado sobre una de los ámbitos en los que permite trabajar el 8-M.

Para la directora el Día Internacional de la Mujer es también una jornada para recordar a las mujeres que todavía sufren en el mundo sin derecho a la educación o que necesitan condiciones laborales dignas. "Todavía hay mucho por conseguir", defiende. También en España, a pesar de ser una suerte nacer en esta tierra por los avances conseguidos. 

Como significado de ese poema que justo después fueron recitando estudiantes y profesores, Laura Sáez destacaba la validez de todas las opciones que tomen las mujeres, siempre que la decisión sea en libertad: tener o no pareja, tener o no hijos, entrar en el mundo laboral o quedarse en casa. "Lo importante es la libertad de elegir".

"Otra mujer estrecha dolores con sus manos suaves y duras, alivia problemas con mariposas y quema luciérnagas en la noche", planteaba una profesora sobre una visión de la mujer complementaria a la que daba una alumna tras ella: "Hay una mujer valiente que cada día se enfrenta al que pensó que era su amado, no parará hasta que la bestia cese". "Hay un mujer que amanece temprano, que camina decidida, segura de que puede ayudar al mundo y deja su empeño en ello", era otro perfil de mujer del que se hablaba en esta obra reivindicativa.