El alcalde de Sevilla, Antonio Muñoz, ha recogido el reconocimiento que la Hermandad del Dulce Nombre de Bellavista ha concedido al Ayuntamiento por su respaldo a la labor social de la misma y, en concreto, a su comedor social. La entrega se ha desarrollado durante la gala benéfica con motivo del décimo aniversario del comedor social celebrado en el Centro Cívico de Bellavista y organizado para homenajear a los voluntarios que hacen posible este proyecto social.

En el acto, el hermano mayor del Dulce Nombre de Bellavista, Diego Centella, ha destacado que "sin la colaboración del Ayuntamiento, el funcionamiento del comedor social sería imposible y, de hecho, esta colaboración es un pilar fundamental de nuestra obra social". Por su parte, Antonio Muñoz le ha devuelto las gracias a la hermandad por el desinteresado trabajo que realiza hacia las personas más necesitadas del barrio y del conjunto de la ciudad y, especialmente, ha destacado el papel que protagonizan las y los voluntarios. "Continuaremos con esta senda de colaboración", ha comentado.

"Sevilla ha sido siempre una ciudad solidaria. En el Ayuntamiento os necesitamos, necesitamos el tejido social para atender a las familia más vulnerables", ha agregado el alcalde, quien ha estado acompañado por la delegada del Distrito Bellavista-La Palmera, Carmen Fuentes, y por el presidente del Consejo General de Hermandades y Cofradías de Sevilla, Francisco Vélez. En el acto, la Agrupación Musical Nuestro Padre Jesús de la Redención interpretó varias marchas, una compuesta específicamente para las y los voluntarios.

La cooperación municipal se articula principalmente a través del programa anual de subvenciones municipales para comedores sociales. Así, según la resolución provisional aprobada el viernes pasado en Junta de Gobierno Local, el proyecto presentado por la Hermandad del Dulce Nombre de Bellavista tendrá garantizada su estabilidad durante otros dos años (2023 y 2024), con una asignación de 137.186,98 euros. Para el año en curso, 2022, se le concedieron 62.526,42 euros. Con esta asignación bienal, se pretende conferir una mayor estabilidad a esta labor social, así como reducir las tramitaciones administrativas.