El Palquillo

El Gran Poder conquista territorios

Santa Misión del Gran Poder. / Antonio Pizarro

En su mano, el poder, el imperio y toda Sevilla. De su plaza, en la que reside desde hace más de 300 años, a los Tres Barrios, traspasando y abriendo de par en par la frontera del viejo Tamarguillo que ejerce de barrera con esa Sevilla necesitada que ya cobija al Señor. El Gran Poder protagonizó este sábado un acontecimiento histórico que trasciende lo que es un traslado o una procesión por su dimensión espiritual y caritativa. El Señor discurrió por las collaciones de San Lorenzo, San Andrés, San Pedro, Santa Catalina y San Román, San Roque, San Benito y la Concepción antes de llegar a la que será su casa durante los próximos siete días: la parroquia de la Blanca Paloma.

Amanecía este sábado en Sevilla con una temperatura más que fresca, lo que quizás hizo que la mayor parte del público retrasara su encuentro con el Señor a las horas centrales del día. En San Lorenzo, barrio que estará huérfano durante los próximos 21 días, había devotos desde mucho antes de que el día comenzara a clarear. Discurría el Señor en este primer tramo del traslado por territorios conocidos. Conde de Barajas, Trajano, el Duque o la Campana. Pasaba por primera vez bajo las setas de la Encarnación, en cuyas inmediaciones se levantaba el convento de Regina Angelorum cuando Juan de Mesa Talló al Señor en 1620. No fue el Señor a visitar la tumba de su autor en San Martín, como algunos habían especulado, pero sí pasó por la calle que lleva el nombre del imaginero cordobés tras cumplimentar a a la Hermandad del Valle en la Anunciación, dónde Álex Ortiz le cantó una saeta.

Caminaba el Gran Poder hacia un territorio ya explorado, pero ahora irreconocible. Se dirigía el Señor hacia el antiguo convento del Valle. Allí, bajo sus bóvedas góticas, fue bendecido probablemente el 1 de octubre de 1620. El nuevo titular de la Hermandad del Traspaso causó desde el primer momento una profunda y honda impresión en la ciudad que desde entonces lo llama su Señor.

El Gran Poder en la plaza de San Lorenzo. El Gran Poder en la plaza de San Lorenzo.

El Gran Poder en la plaza de San Lorenzo. / Juan Carlos Vázquez

En el Valle se le rezó el primer Padre Nuestro al Gran Poder y en el templo felizmente recuperado por la Hermandad de los Gitanos, se vivieron algunos de los momento más especiales de la mañana. Salud y Gran Poder frente a frente. La policromía marcada por el paso de los siglos. La Hermandad de los Gitanos puede presumir de que la han visitado las dos grandes devociones de la ciudad: la Virgen de la Esperanza, en el año 2014; y el Señor del Gran Poder en la mañana del 16 de octubre de 2021, 401 años y 15 días después de que fuera recibido por su cofradía.

Tras la emotiva visita, el Señor siguió caminando sobre los pies de sus hermanos y devotos hacia Tres Barrios. Cuando el Gran Poder desembocó a la Ronda Histórica la multitud era ya considerable. "Toda Sevilla, Señor, es borde de tu camino", que escribiera el poeta Antonio Rodríguez Buzón.

El Gran Poder cruza las setas de la Encarnación. El Gran Poder cruza las setas de la Encarnación.

El Gran Poder cruza las setas de la Encarnación. / Juan Carlos Vázquez

Tras la pertinente visita a las dos hermandades de la calle Recaredo, los Negritos y San Roque, viraba el Señor hacía otro punto destacable en su recorrido y muy importante en su historia: la parroquia de San Benito. En la iglesia del antiguo convento benedictino se fundaba en 1431 la Cofradía del Poder y Traspaso de Nuestra Señora y Honra de San Juan Bautista. Avanzaba el Gran Poder por la calle Oriente como un barco rompehielos que abre el camino al fin de la pandemia. En la parroquia de San Benito, se hizo el relevo del cortejo.

El Señor del Gran Poder, a su paso por Luis Montoto. El Señor del Gran Poder, a su paso por Luis Montoto.

El Señor del Gran Poder, a su paso por Luis Montoto. / Juan Carlos Vázquez

El segundo lugar donde entró el Señor fue el asilo de las Hermanitas de los Pobres. Allí fue recibido por un gran aplausos por los mayores que tanto han sufrido durante la pandemia.

Avanzaba el Señor prácticamente calcando el horario previsto camino del barrio de Nervión. Entre una gran gentío y con sus devotos siempre caminando tras él, se aproximaba otra cita histórica. La visita a la parroquia de la Concepción. Allí, la familia de Juan Araújo, mítico futbolista del Sevilla, pudo recordar la visita del Gran Poder de 1965 cuando iba camino de Santa Teresa. Una historia que es más leyenda, puesto que ni el hijo de Araújo había fallecido ni el Señor entró en su garaje. Tras la visita a las hermandades del Sagrado Corazón de Jesús, que ya lo recibió en 1965, y la Hermandad de la Sed, el Señor avanzó dispuesto a derribar para siempre la barrera de la Ronda del Tamarguillo para hacer suyo el barrio de Los Pajaritos. En la parroquia de la Blanca Paloma entraba alrededor de las siete de la tarde para poner el punto y seguido a 21 días que serán historia de la ciudad.

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