Siete meses de lucha. Pablo Núñez lleva desde el mes de diciembre del año pasado pidiendo una solución para que su hijo, en silla de ruedas, pueda acceder a la Iglesia de la Anunciación. Este templo renacentista, declarado Bien de Interés Cultural en 1969, tiene tres escalones en su acceso principal que dificultan la entrada a personas minusválidas.
La Hermandad del Valle y la Universidad de Sevilla, las dos instituciones que tienen derecho al uso de este monumento desde principios de la década de los 70, para cultos y actividades culturales respectivamente, han intentado poner remedio a esta problemática.
La Universidad propuso acceder al templo desde la puerta que conecta con la Facultad de Bellas Artes, donde sí hay una rampa habilitada. Cuando intentaron abrir la puerta encontraron que al otro lado había algunos elementos que impedían el acceso: escaleras, vallas y una alfombra pertenecientes a la cofradía del Jueves Santo. Además, la llave que posee la Universidad sólo abre la hoja de la puerta, y para que pueda pasar la silla de ruedas es necesario abrir la puerta al completo, siendo únicamente la Hermandad del Valle quien puede hacerlo con otra llave.
Por su parte, el hermano mayor de la citada cofradía, Gonzalo Pérez de Ayala, asegura que estos elementos estaban bloqueando la puerta de manera ocasional y que otra solución más efectiva sería la instalación de un salvaescaleras en la puerta principal, en la calle Laraña. Asimismo, Pérez de Ayala comenta que los tres escalones de la puerta principal se pueden salvar fácilmente con ayuda del capiller. "Yo mismo he ayudado a personas a subir en muchas ocasiones", añade.
Pablo Núñez ha publicado fotografías de diferentes fechas, y sólo en una aparece una la rampa que la corporación del Jueves Santo instala para sus cultos u ocasiones especiales. "Lo único que pido es que esta rampa, que se pone sólo en días muy señalados, esté todo el año". En este sentido, el hermano mayor justifica que para poner esa plataforma es necesaria la apertura total de la puerta y que la instalación precisa de varias personas, por lo que no está pensada para su uso diario.
"No busco culpables, sólo soluciones", expone Pablo en uno de sus mensajes publicados en redes sociales, quien apunta que en otras iglesias a las que acuda con su hijo no tienen este problema para acceder. Hay interés por parte de las partes implicadas para encontrar una solución lo antes posible. Cabe recordar que para cualquier intervención en este templo deberá contar con la autorización expresa de la Consejería de Cultura y Patrimonio Histórico de la Junta de Andalucía.
Entre la foto de la izquierda y la de la derecha median casi dos meses y promesas de poner una rampa por parte de @unisevilla y de la @hdad_elValle . Lo demás, sigue igual. No se permite la entrada a un chico en silla de ruedas. Solo pedimos una rampa. Tan cerca y tan lejos. pic.twitter.com/9i6OcwW6Oe
— Pablo Núñez (@beodo5) February 25, 2022
Comentar
0 Comentarios
Más comentarios