Un primer viernes de marzo marcado por el frío y por la lluvia. La jornada de ayer, muy esperada por los cofrades y que este año ha coincidido con el primer viernes de cuaresma, no pudo ser completa. La lluvia que cayó hasta mediada la tarde truncó la salida del vía crucis del Señor de la Sentencia, hizo que el Polígono acortara el recorrido del vía crucis del Cautivo y Rescatado e impidió que la misa de la Pía Unión y el Vía Crucis se celebrara como cada año. Donde la lluvia no alteró la afluencia de fieles fue en San Ildefonso.

Las tradicionales citas del primer viernes de marzo, como el besapié a Jesús Nazareno, el Vía Crucis de la Pía Unión o las citas con los Cautivos, sumaban este año nuevos atractivos, como el vía crucis del Señor de la Sentencia, que finalmente se celebró por el interior de la Basílica de la Macarena ante el riesgo de precipitaciones. La lluvia impidió que la misa anual de la Pía Unión se celebrara en el patio principal de la Casa de Pilatos, lugar en el que se venía haciendo durante los últimos años al tener mayor capacidad que la capilla de la Flagelación. La celebración eucarística, presidida por el arzobispo de Sevilla, monseñor Asenjo, se trasladó a las antiguas caballerizas. El prelado hispalense hizo un año más un llamamiento a la conversión durante la cuaresma para prepararse para la llegada del Señor. Asenjo espetó a los presentes a seguir un camino de silencio y soledad; a practicar una oración más larga, serena y constante; a realizar ayuno y penitencia; y a auxiliar a los pobres y los que sufren.

Cerca de la Casa de Pilatos, el Cautivo de San Ildefonso presidió un altar en el que estaba acompañado de la bellísima Virgen de Juan de Astorga, y San Juan. También fueron muchos los fieles y devotos que acudieron a la Real Iglesia de San Antonio Abad para cumplir con otro rito: besar el talón de Jesús Nazareno, ataviado con la túnica denominada "del delantal". El Cautivo de Santa Genoveva, el Cautivo ante Pilato de Torreblanca o la Virgen del Mayor Dolor y Traspaso también estuvieron expuestos a los fieles.