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El alma de la Semana Santa, al alcance

  • Diario de Sevilla presenta en el Real Alcázar el coleccionable de cuaresma, basado en una serie de láminas de Fernando Aguado

Los Reales Alcázares fueron ayer el escenario de la presentación del coleccionable El Alma de la Semana Santa, que Diario de Sevilla ofrecerá a sus lectores a partir del próximo domingo. Esta colección está compuesta por 21 láminas realizadas por el pintor y escultor Fernando J. Aguado.

El acto de presentación estuvo presidido por el presidente del Consejo, Manuel Román Silva; el director regional en Andalucía de la Caja de Ahorros del Mediterráneo -patrocinadora de esta colección-, Ricardo Camilleri; el miembro del consejo editorial de Diario de Sevilla Carlos Colón y el autor de la colección.

El primero en tomar la palabra fue Carlos Colón, que destacó la trayectoria que ha tenido el periódico desde que comenzó su andadura en el terreno de los coleccionables sobre la Semana Santa, haciendo hincapié en la pluralidad y el sentido crítico que siempre han sido la seña de identidad de este rotativo.

Ricardo Camilleri destacó la apuesta de la CAM por "estar cerca del tejido social y cultural de Sevilla". En estos cuatro años que la entidad financiera lleva establecida en Sevilla -donde en toda la provincia posee 23 oficinas y 400 a nivel regional- ha sido parte esencial para la consecución de grandes proyectos relacionados con el mundo del arte y de las hermandades en particular. No en vano, el más reciente ha sido el acuerdo de colaboración firmado con la Hermandad de la Macarena para la restauración del museo de la basílica.

Carlos Colón se refirió a dicho acuerdo como la mejor forma de entrar en Sevilla: "Como lo hicieron los Reyes Católicos, Carlos IV y Felipe V: por la puerta de la Macarena, uno de los corazones de Sevilla, porque el otro late en San Lorenzo".

Después fue el propio Fernando Aguado quien presentó su obra. Tras la proyección de un audiovisual donde se mostraban algunas de las obras que ya ha realizado este joven imaginero -la última de ellas fue el misterio de la Presentación al Pueblo para la localidad alicantina de Aspe-, comenzó a relatar con un lenguaje casi lírico, y un gran manejo de la prosa, todo aquello que había querido expresar en estos 21 "apuntes". El mismo los definió como "aventura de juventud, un gran reto en el que desnudo mis sentimientos pintando en el papel".

Aguado declaró que su intención desde un principio ha sido la de llegar al sevillano "de a pie", para intentar explicarle "algo tan difícil como la Semana Santa". "Describir el alma de Sevilla -prosiguió- es difícil y ahora más que estamos en primavera".

Fue desgranando cada detalle, cada sensación de sus láminas: la tradición que comienza en un nazareno de la Hermandad de la Borriquita, la devoción plasmada detrás del Cautivo del Tiro de Línea, las manos de salvación que ofrece la Virgen de la Victoria, el llamador que mejor suena en el silencio de la Catedral, el programa de mano desgastado ya un Sábado Santo o la cofradía de regreso, con el cansancio reflejado en el rostro de los nazarenos.

El artista ahondó en su discurso declarando que "ahora Diario de Sevilla os cuenta mi gran pasión, que son las hermandades" y concluyó su intervención afirmando que "en cada trazo está lo mejor de mí. Éste es un regalo que le hago a Sevilla".

El último en intervenir fue el presidente del Consejo. Román aludió a la trayectoria de este periódico en la información cofradiera y la calificó de "exhaustiva y seria". Consideró que en la actualidad todos los medios de comunicación están realizando una gran labor por informar de cuanto acontence en el mundo de las cofradías. Por este motivo, Román Silva pidió una reflexión para que la relación entre la hermandad y el periodista esté presidida siempre por la responsabilidad entre ambas partes.

También se refirió al autor de las láminas como un joven "que nos tiene acostumbrados a darnos siempre cosas importantes". Román vaticinó para esta obra un "gran éxito".

Carlos Colón cerró el acto de presentación de la obra, tomando prestada para el final una de las citas de Joaquín Romero Murube, conservador del Alcázar, y haciendo hincapié en que en la cuenta atrás para la Semana Santa "Diario de Sevilla también se quiere sumar con este coleccionable a los gozos de las vísperas".

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