Un nuevo aumento de los ingresos. Las hermandades que realizan estación de penitencia a la Catedral aumentarán un 3,4% la subvención que reciben por parte del Consejo de Cofradías como consecuencia de la explotación de las sillas y palcos de la carrera oficial. Las cofradías de penitencia dieron su respaldo a las últimas cuentas de la era Bourrellier presentadas durante el pleno celebrado en la tarde ayer.

El Consejo de Cofradías ingresó casi 3,6 millones de euros por la explotación de las sillas y palcos, principal fuente de financiación de las hermandades. El aumento de la recaudación apenas fue del 0,27% con respecto al año pasado, una cifra que se explica por la subida del 1% en el precio de los asientos, pero las cantidades que perciben las cofradías que realizan la estación de penitencia en la Catedral aumentarán un 3,4% en buena medida por la eficiente gestión económica realizada por el tesorero Tomás Vega. La optimización de los recursos y el gasto y la reducción de costes ha posibilitado que las hermandades que procesionan con dos pasos, que son las más numerosas, ingresen 32.512 euros, 1.067 más que en 2015; las de un paso, obtendrán 26.074 euros, 856 más que la pasada Semana Santa; mientras que las de tres pasos se llevarán 38.951 euros, 1.279 más. El montante total a repartir entre las hermandades es de algo más de 2,1 millones. De esta cantidad, el 60% se divide a partes iguales entre las 60 hermandades de penitencia que discurren por la carrera oficial, y el 40% se divide entre los 122 pasos.

Las hermandades que no realizan estación de penitencia en la Catedral, por su parte, recibirán globalmente una cantidad mayor que el año pasado, aunque la subvención individual será menor al haberse incorporado una nueva hermandad, la de la Milagrosa. El año pasado se aprobó que se repartieran el 5,5% sobre el neto. Según estos cálculos, las hermandades con un paso ingresarán 9.724 euros, 803 menos que en 2015; mientras que las de dos pasos se llevarán 13.325 euros, 1.149 euros menos.

El Consejo de Cofradías también ha acordado subir el precio de las sillas un 1% de cara al próximo año, por lo que el asiento más caro en la tribuna de la Plaza de Campana pasará a costar 155,26 euros.