El portavoz de la Asociación Profesional de la Magistratura (APM), Antonio García, consideró ayer que el procedimiento incoado por el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) al titular del juzgado de lo Penal número 1 de Sevilla, Rafael Tirado, por no ejecutar la condena de Santiago del Valle, presunto asesino de la niña Mari Luz Cortés, "terminará por demostrar que no existen razones para considerarle merecedor de una sanción por falta muy grave".

García se pronunció de esta forma después de que la comisión disciplinaria del CGPJ acordara el pasado lunes abrir un expediente al magistrado por una falta muy grave de desatención, debido a la "pasividad, dejación de funciones y ausencia de control" en las que podría haber incurrido.

La APM, colectivo del que Tirado fue presidente en Andalucía hasta septiembre de 2007, aseguró no tiene "ninguna duda" de la "probidad y compromiso profesional" del juez y defendió su actuación argumentando que los magistrados "no constituyen en los órganos judiciales seres omnipotentes y omnipresentes".

"Su función no anula ni por supuesto les atribuye el deber de control o vigilancia de las que corresponden al personal, dado que actualmente carecen de competencias de organización, gestión, inspección y jefatura, habiéndoseles sustraído la facultad de superior dirección que con anterioridad ostentaban, no correspondiéndoles estar al tanto y pendientes de todo y por todo, sumando a lo propio lo que resulta ajeno", afirma la APM.

La asociación de jueces, de tendencia conservadora y mayoritaria en la carrera judicial, también señaló que "la saturación, las disfuncionalidades, la descoordinación -cuando no desorganización-, las carencias de todo tipo y la obsolescencia en los medios son características predicables y definitorias del estado que presentan en la actualidad una gran parte de los órganos judiciales del país". En este sentido, Antonio García solicitó un "compromiso político serio, decidido y sincero" que pueda traducirse en "un sólido y duradero consenso" que permita mejorar los actuales problemas de la Justicia, que resumió en la "falta de modernidad y puesta al día de la organización judicial". Esta situación, según el colectivo profesional, provoca a los jueces "constantes sobreesfuerzos sin estímulo ni reconocimiento alguno". El portavoz de la APM expresó su "más sentida condolencia" a la familia de Mari Luz Cortés.