El Hospital Virgen Macarena destaca que las patologías de la voz se han incrementado ante las secuelas producidas por el Covid-19, tras indicar que por ejemplo, su Servicio de Otorrinolaringología (ORL) ha atendido durante el pasado año más de 850 pacientes con disfonía, siendo un grupo numeroso el atendido por secuelas de intubaciones y estancias prolongadas en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) durante la enfermedad.

Según indica el centro hospitalario, en el ultimo año y a causa de la pandemia, el diagnostico y atención del paciente con disfonía ha supuesto un “hándicap importante, debido a que su valoración y tratamiento son generadores de aerosoles”. “Las medidas de protección han cambiado y el abordaje telemático ha entrado en escena de forma importante”, advierte. Además, destaca que la patología de la voz en el contexto de la infección por coronavirus se ha hecho muy frecuente, asociándose especialmente a aquellas personas que han requerido intubaciones y estancias prolongadas en UCI.

En este punto, el hospital destaca que tanto el Servicio de Otorrinolaringología como la Unidad de Foniatría mantienen la atención presencial a través de la adaptación de exhaustivas medidas de seguridad para la protección de los pacientes y de los profesionales durante la realización de las exploraciones de la voz, dado que son situaciones en las que se generan importantes cantidades de aerosoles.

De esta manera, sólo en el año 2020 el Servicio de Otorrinolaringología ha atendido a más de 850 pacientes con problemas de la voz y ha intervenido a 187 de ellos, mientras que la Unidad de Foniatría ha llegado a realizar más de 300 nasofibroendoscopias flexibles diagnósticas, más de 200 análisis acústicos de la voz y alrededor de 180 estudios estroboscópicos.

Se han tratado de forma presencial por parte de la Unidad de Logopedia más de 370 pacientes con disfonía orgánica y/o funcional, incluidos aquellos con disfonía causada por el SARS-CoV-2 durante su ingreso hospitalario y se ha efectuado su seguimiento posteriormente de forma ambulatoria.

Además, se ha incorporado el control telefónico de la evolución de más de 250 pacientes de diferentes perfiles y se ha utilizado en muchos de ellos la aplicación Mercurio y la asistencia telemática. “Se ha conseguido esta manera aplicar técnicas de tratamiento que permiten seguir la terapia en el domicilio de los pacientes sin tener que desplazarse al hospital”, añade.

El hospital destaca, además, la elaboración de información para pacientes y la edición de videos instructivos por parte de la Unidad de Foniatría y Logopedia para mejorar la voz de los pacientes aislados por la pandemia en sus domicilios.