El Ayuntamiento, a través de la acción coordinada de la Gerencia de Urbanismo, Emasesa y el distrito Bellavista-La Palmera, ha iniciado las obras de renovación integral de la calle Chile, "que no sólo van a garantizar el suministro y la calidad del agua, sino que proponen soluciones de accesibilidad universal para personas con diversidad funcional y un mayor espacio para los peatones a través de la reurbanización que venían reclamando los residentes desde hacía años", según el delegado Joaquín Castillo, quien visitó recientemente la zona.

Esta intervención tiene un presupuesto de 593.618 euros y refuerza la línea de las actuaciones que se han programado para la barriada de Heliópolis y su entorno, así como en todo el distrito, según informó el Ayuntamiento en una nota.

La calle contará con un diseño de plataforma única y se ampliará la zona peatonal

En este sentido, Emasesa ha procedido a la renovación de la red de abastecimiento y saneamiento con el objetivo de mejorar el servicio prestado, particularmente la presión y el caudal, eliminar posibles fugas en el sistema y optimizar la capacidad de captación de aguas pluviales y su evacuación a través de la sustitución de más de 700 metros de tuberías y las correspondientes acometidas domiciliarias y elementos singulares, que se encontraban obsoletos.

Se ha aprovechado la obra además para que otros distribuidores realicen mejoras en determinados suministros, como es el caso de la renovación del sistema de fibra óptica para particulares.

El desarrollo de esta actuación ha contemplado, asimismo, la renovación integral de la vía, "que gana en accesibilidad para el tránsito de peatones en una decisión que parte del consenso con las entidades y los residentes", explicó el delegado del Distrito Bellavista-La Palmera.

En este sentido, se sustituirán los actuales acerados por un diseño de plataforma única en base a adoquín de hormigón de diferentes formatos que diferencien la calzada del acerado. La acera de la izquierda en dirección a la calle Ifni ampliará la zona de tránsito, que llegará a los tres metros de superficie.

Incluirá en su interior alcorques para los árboles existentes con marmolillos reciclados reforzando su espacio. Se mantiene la banda reservada para aparcamientos en cordón en el acerado de la derecha. Igualmente, se utilizarán bolardos que la delimitarán para preservar zonas comunes, como es el caso de la Plaza del Sagrado Corazón de María. También se renovará la pavimentación y la señalética.

El plazo de ejecución de esta actuación será de siete meses y viene precedido del trabajo y consenso con entidades, así como de una campaña informativa con los vecinos, con los que se ha analizado las mejoras necesarias para minimizar el impacto de la actuación. El tráfico de la vía quedará parcialmente interrumpido, así como en calles colindantes y sólo se facilitará el acceso a los residentes. Se instalarán pasarelas, vallas, señalizaciones y pasos alternativos que eviten las molestias ocasionadas por los trabajos. Igualmente, se ha establecido un plan de trabajo específico por parte de Lipasam.