El alcalde de Sevilla, Juan Espadas, ha anunciado que el siguiente paso en su política de vivienda, una vez ocupados la totalidad de los pisos de la empresa municipal Emvisesa, pasa por lanzar un programa de alquiler social a través de inmuebles de propietarios privados, para lo que se consignarán fondos en los presupuestos de 2017.

Espadas, en una entrevista concedida a Europa Press, indica que se necesitan "como mínimo" un centenar de viviendas para atender los casos más urgentes de la ciudad. En este punto, recuerda que las que tenía vacías Emvisesa al principio de su mandato, "que eran muchas", se han dedicado ya a cubrir las necesidades urgentes "de muchas personas que no tenían otras opciones". El alcalde recuerda que, para tal fin, se creó durante el pasado año la Oficina Municipal por el Derecho a una Vivienda Digna, órgano en el que se atiende de modo "integral y coordinado" a dichos solicitantes.

Dentro de este contexto, el regidor hispalense defiende la opción del alquiler de viviendas privadas hasta que Emvisesa pueda disponer de nuevos pisos propios con la realización de un plan municipal, que aumente la oferta pública en la ciudad. Según Espadas, dicha operación, "tendría que haberla realizado Zoido para adelantar tiempos, pero no la hizo". "Las viviendas no se improvisan y ahora hay que desarrollarlas completamente", lamenta Espadas.

El primer edil hispalense añade que esto requería estabilizar a la empresa, "lo que se ha hecho salvándola de estar al borde de la quiebra". Por tal motivo, advierte que lo que más urge es que haya disponibilidad económica para poder ir a alquiler de viviendas del parque privado, ya que en los bancos "no se pueden encontrar esos pisos vacíos porque o no tienen o prefieren gestionarlos ellos directamente".

Por tal motivo, Espadas buscará esas opciones dentro de la iniciativa privada, por lo que se necesitarían unos recursos que el gobierno local pretende fijar en el próximo presupuesto. De este modo, se establecerá la citada convocatoria y las líneas que necesitarían esas familias a la espera de que se le puedan adjudicar.

Se barajan distintas fórmulas, entre las que pone de ejemplo la colaboración con la Junta, mediante la cual se otorgan ayudas directas al alquiler. También se estudian otras opciones que podrían ser más ágiles administrativamente de la mano de Emvisesa. "Necesitaríamos como mínimo entre 80 y 100 viviendas para los casos más urgentes", insiste.