El alcalde de Sevilla, el popular Juan Ignacio Zoido, aseguró ayer que el Ayuntamiento ya se encuentra en proceso de estudio de un nuevo destino de utilidad de las cámaras y el sistema tecnológico en los que se basa la aplicación del plan de regulación de tráfico del centro de la ciudad, cuya derogación ya se está preparando, con una serie de medidas complementarias para las que ha solicitado "paciencia". En declaraciones a los periodistas, Zoido reiteró la intención de la Corporación municipal de dar "amplia información" sobre los pasos a seguir al respecto "para que todos lo conozcan y sepan por qué se hace", mientras que, al mismo tiempo, también se dará de las actuaciones que el Consistorio llevará a cabo "de manera alternativa y prácticamente simultánea para garantizar la prestación de los servicios públicos".

En este aspecto, el primer edil hispalense citó los aparcamientos que la Administración local promoverá y las actuaciones en la empresa municipal de transportes (Tussam) para que no sólo se garantice el acceso al casco histórico desde los barrios, sino también el recorrido por el centro de microbuses eléctricos. "Creo que tanto el sistema como las propias cámaras serán muy útiles", afirmó.

En lo que respecta a las peticiones de vecinos respecto a una derogación "progresiva" del plan y la propuesta de los comerciantes para que se reclamen daños y perjuicios, Zoido especificó que "todo tiene que llevar sus pasos, y no me quiero precipitar".

Por otra parte, Zoido desveló que aún quedan por ver la luz pública resoluciones judiciales respecto de la situación de la biblioteca promovida por la Universidad de Sevilla y cuya construcción en los Jardines del Prado ha sido recientemente tumbada por el Tribunal Supremo, señalando su pretensión de seguir dialogando con la Hispalense cuando tenga a su disposición la documentación jurídica necesaria. El alcalde explicó que aún no se han emitido los informes jurídicos por parte de la Gerencia de Urbanismo, mientras que "faltan decisiones judiciales, que no sé si se han tomado y están pendientes de notificación o aún no se han tomado". Por ello, añadió que, una vez que el Tribunal Supremo resuelva todas las causas pendientes relacionadas con este aspecto y el Ayuntamiento cuente con los informes precisos, "seguiremos hablando con la Universidad con el objeto de dar una solución adecuada, conforme a derecho y que produzca el mejor perjuicio posible".