Sevilla

Detenido por robar cerdos de una finca y venderlos en una calle de Torreblanca

  • Dos delincuentes sustrajeron los animales de una finca y los revendían antes de Navidad en la calle Manzano

  • La Policía recuperó diez animales vivos y encontró tres muertos en las inmediaciones

Un policía nacional traslada al detenido por el robo de los cerdos.

Un policía nacional traslada al detenido por el robo de los cerdos.

Robaron cerdos vivos de una finca de Alcalá de Guadaíra y los vendieron en Torreblanca. Ese fue el origen de una de las últimas investigaciones de la Policía Nacional en Sevilla, que se ha saldado con la detención de un hombre como presunto autor de un robo con fuerza y otro contra la salud pública. Este último cargo se le imputa porque los animales no eran aptos para el consumo. 

La investigación se inició el 15 de diciembre de 2020, según informó este martes la Policía Nacional en una nota de prensa. Ese día, un ciudadano llamó al 091 alertando de que había dos personas que estaban vendiendo cerdos vivos en la calle Manzano, en una de las zonas más deprimidas del barrio de Torreblanca, en el entorno de la plaza del Platanero. Es habitual el robo de productos ibéricos antes de las fiestas navideñas, pero no tanto de los cerdos vivos.

Un patrullero de la Policía acudió al lugar y observó un camión cargado con diez cerdos ibéricos. Al ver a los agentes, todas las personas que estaban allí se dieron a la fuga, tanto los que vendían los animales como los que contemplaban la escena y los potenciales compradores.

Los policías iniciaron una inspección en la zona y encontraron tirados en las inmediaciones hasta tres cerdos sin vida. Los agentes interceptaron el camión con los animales que seguían vivos e hicieron las gestiones oportunas con los servicios municipales para que retiraran de la calle a los muertos. Los vivos quedaron depositados en el Zoosanitario.

Las sospechas de que los animales eran de procedencia ilícita eran claras. La investigación recayó en el Grupo de Policía Judicial de la comisaría del distrito Este, que pudo determinar que los cerdos habían sido sustraídos de una dehesa cercana, en el término de Alcalá de Guadaíra.  

Los agentes también averiguaron que los cerdos habían sido tratados con medicamentos y no eran aptos para el consumo humano hasta pasados 10 meses. Por este motivo, los investigadores tuvieron que realizar gestiones a través de las autoridades sanitarias por si se hubiera detectado alguna intoxicación en la población por ingesta de carne de porcino durante las fechas en que ocurrieron los hechos. No se ha constatado ningún caso.

La Policía añade que la investigación e identificación sobre los presuntos autores de los hechos se ha visto dificultada por las complicaciones que presenta su localización en la barrida de Torreblanca. No fue hasta el día 2 de febrero, cuando tras un dispositivo de vigilancia se pudo detener a uno de los sospechosos, J. R. C., de 32 años. El segundo de ellos está todavía en paradero desconocido.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios