La Policía Nacional detuvo la noche del domingo al hombre que presuntamente abrió fuego contra su vecino la madrugada del viernes al sábado en Torreblanca. El tiroteo se produjo a las cuatro y veinte de la mañana en la calle Torregorda. El presunto agresor disparó un tiro de escopeta que impactó en una pierna de su vecino, de 32 años, que resultó herido y tuvo que ser trasladado al hospital Virgen del Rocío en una ambulancia del servicio de emergencias sanitarias del 061.

El agresor y la víctima llevaban todo el día discutiendo. Viven uno encima del otro en un bloque de la calle Torregorda, uno en la segunda planta y otro en la primera. Las primeras investigaciones policiales apuntan a que el motivo de la discusión era el ruido que los niños de la víctima hacían, que molestaban mucho al presunto autor del disparo porque se oían a un volumen muy alto en su casa. Así lo manifestó a la Policía la pareja del herido.

Según el relato de esta mujer, a las cuatro de la madrugada del viernes al sábado, el vecino de abajo volvió a subir y aporreó la puerta con un objeto contundente. Su marido salió a abrir y se encontró con el vecino, que le volvió a reprochar el exceso de ruido que salía de la vivienda. Ambas personas discutieron durante unos minutos en el rellano de la segunda planta. La pelea se trasladó a la escalera, unos metros más abajo, hasta que sonó un disparo.

La mujer contó a los policías que, acto seguido, su marido llegó al piso con una herida en la pierna. Llamaron al 112 y hasta el lugar de los hechos se trasladaron agentes de la Policía Nacional y Local y del 061. Los policías locales, que tenían un dispositivo en Torreblanca esa noche, fueron los primeros en llegar. El tirador ya se había escapado. Los agentes no obtuvieron colaboración de los vecinos del bloque, algunos de los cuales llegaron a decir que en la casa del autor del disparo vivía una señora mayor. Finalmente fue detenido la noche del domingo.