La empresa municipal de la vivienda de Sevilla (Emvisesa) aseguró este miércoles que se encuentra a expensas de un informe de la Gerencia municipal de Urbanismo sobre el bloque del número 4 de la calle Eduardo Torres, en la barriada de Regiones Devastadas, en el que se ha producido la caída de un falso techo por las lluvias, señalando que si se produce una orden o decreto de desalojo se acelerará la demolición de este inmueble, que tendría lugar en marzo.

El gerente de Emvisesa, Juan Carlos de León, explicó que el incidente, consistente en la caída en una vivienda de un falso techo de escayola, "no es para que la población se alarme". En este sentido, tras las primeras actuaciones de los bomberos para la retirada de restos del piso -donde sus moradores continúan, por el momento, habitando-, los informes iniciales a la humedad producida por filtraciones como la causa del suceso.

En este sentido, el servicio de Conservación de la Edificación está elaborando el informe diagnóstico, expuso De León, que agregó que el Consistorio viene trabajando desde hace un tiempo en este bloque, con 17 inquilinos y un pequeño local comercial, de los que "la gran mayoría ya estaba de acuerdo con los términos de nuestra actuación, si bien había cinco familias que no habían colaborado con nosotros".

En este sentido, el gerente de Emvisesa reivindicó el carácter social de la renovación urbana acometida y señaló que "cada caso es un mundo", con una intervención "individualizada y consensuada con los vecinos". 

Tras lo ocurrido, y si se decide el desalojo, lo que el Ayuntamiento hará será "acelerar lo que ya íbamos a hacer dentro de pocas fechas", en referencia al realojo y desalojo de residentes "en las mismas condiciones que los demás" y el posterior derribo, que se acometería en marzo, junto al ya previsto de otros inmuebles que acogen a 36 vecinos, con sus viviendas ya elegidas.

La vivienda afectada, ubicada en un segundo piso, estaba "muy deteriorada" y el propio hijo del matrimonio de ancianos que vive en ella, Manuel Romero, había elevado al Ayuntamiento hispalense hace aproximadamente un mes un escrito "solicitando el realojo por razones humanitarias", porque estos inquilinos con contrato de renta antigua ya temían por la seguridad del edificio a cuenta de que el Ministerio de Vivienda no habría asumido las preceptivas labores de conservación, según indicó éste a Europa Press.