Previsión El tiempo en Sevilla para este Viernes Santo

Sevilla

Freno al proyecto de Sevilla Park un año después de iniciarse los trámites

  • El Ayuntamiento retiene el expediente a la espera de que la Junta determine si hay riesgo por la cercanía de depósitos de combustible Los promotores, molestos, daban por concluido el proceso

El proyecto para construir un macrocomplejo de ocio y comercial en terrenos del Puerto, bautizado como Sevilla Park, está en estos momentos en dique seco. Un año después de que el Ayuntamiento iniciara los trámites para autorizar esta iniciativa, que cuenta con todas las bendiciones políticas, el expediente está paralizado a la espera de un informe de la Junta de Andalucía, a quien el gobierno municipal ha consultado ante la duda de que puedan existir riesgos para la seguridad, dada la cercanía de dicho espacio con un recinto donde la Compañía Logística de Hidrocarburos (CLH) tiene instalados depósitos de combustible.

Esta decisión retrasará notablemente la puesta en marcha del proyecto, dado el paréntesis electoral que postergará como mínimo al verano cualquier paso adelante. Los promotores de Sevilla Park mostraron ayer su sorpresa porque, al igual que el Puerto de Sevilla, daban por concluido el expediente. De hecho, hace justo dos meses, la Gerencia Municipal de Urbanismo ya había recibido toda la documentación necesaria para iniciar la modificación puntual del Plan Especial del Puerto de Sevilla, en sus áreas AP5 y AP18: los informes de diferentes administraciones públicas solicitados y la contestación a todas las alegaciones presentadas, incluida la de CLH. No obstante, fuentes municipales aseguraron ayer que resolver una alegación que se refiere a riesgos industriales es competencia de la Junta de Andalucía.

El argumento que ha llevado al Ayuntamiento a frenar esta iniciativa privada, la seguridad, ya parecía salvado con un informe de la Abogacía del Estado y también del Puerto. El Ayuntamiento y la Autoridad Portuaria mantienen posiciones contrarias sobre la compatibilidad del complejo de ocio y las instalaciones de la compañía de hidrocarburos. Un informe de la Gerencia de Urbanismo planteó en junio de 2014 que había que justificar esta convivencia, mientras que el Puerto resolvió el pasado mes de julio que no había problemas de seguridad y recordó que, de hecho, en la zona ya hay viviendas cercanas en la avenida Juan Pablo II y que allí se celebra la Feria, sin que se haya cuestionado la seguridad en ningún momento.

Ante este conflicto de intereses, pues CLH había alegado que su instalación es de interés general y es estratégica, una única alternativa sería una expropiación para propiciar el traslado de la compañía con la que se habrían entablado unas primeras conversaciones para una posible mudanza a suelos portuarios del Cuarto, más al sur. Según ha podido saber este periódico, CLH pretendería salir indemne de este proceso.

La empresa apunta en su alegación que ya hay un plan de emergencia aprobado en 2009 y que habría que fijar una distancia de 40 metros para garantizar la seguridad, un perímetro que se respeta según los informes técnicos. La Autoridad Portuaria opina que estos suelos del Puerto han quedado sumidos en una zona urbana, donde se están proyectando actividades compatibles, y que si la compañía considera que debe haber un mayor círculo de seguridad sería más lógico negociar un traslado o ampliar sus suelos.

El trámite se inició en abril de 2014, cuando el Puerto solicitó formalmente al Ayuntamiento la modificación puntual de su plan especial y se dio a conocer la iniciativa. En julio se aprobó el documento inicial y se abrió el periodo de información pública. Durante el proceso, el proyecto recibió cuatro alegaciones, una de ellas favorable, que se resolvieron en seis meses. Quienes alegaron en contra fueron Ecologistas en Acción, el arquitecto José García Tapial y CLH. El Puerto también aportó informes, todos favorables, de la Junta de Andalucía, desde las consejerías de Medio Ambiente a Fomento, Comercio, Turismo y Ordenación del Territorio. Y ya el abogado del Estado había informado positivamente sobre el proyecto. Una salvedad reseñada en varios de los informes, incluido uno de Urbanismo, es la necesidad de un plan de movilidad que facilite la circulación y los accesos. Una cuestión que habría que resolver en los sucesivos trámites.

Por ello, tanto los inversores como el Puerto, como promotor, esperaban que el gobierno de Juan Ignacio Zoido hubiera llevado a pleno el expediente para dar curso al cambio urbanístico necesario para iniciar las obras antes de que se agotara el mandato. Y no ha sido así.

Los promotores no ocultaron ayer su malestar con los retrasos y frenos en un proyecto que parecía viable. El calendario que manejaban en un primer momento ya se había retrasado, pues la idea era que el gran auditorio para conciertos funcionase en Sevilla a finales de este año y, para ello, ya debería estar en obras. El trámite era complicado, teniendo en cuenta que implica un cambio de usos del suelo, pero ha superado las previsiones de los inversores, que mantienen su apuesta por Sevilla, a pesar de que se han desbaratado sus planes, pues confiaban en que los trabajos podrían iniciarse antes de que concluyese este año para poder programar eventos ya en 2016.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios