El Gobierno retrasó ayer hasta 2014 la recuperación de España al cambiar su previsión de crecimiento de dos décimas por una recesión del 0,5% del PIB para 2013, a lo que se añade una tasa de paro del 24,3% de la población activa. Se trata del cuadro macroeconómico con el que se ha elaborado el techo de gasto para el año próximo, y que aprobó ayer el Consejo de Ministros como base para los siguientes presupuestos generales del Estado.

Con la previsión de una caída del 0,5% de la actividad en 2013 se cumple el pronóstico que hizo la pasada semana el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, que adelantó una visión más próxima a la de organismos como el FMI, de caída del 0,6% del PIB para 2013.

Se mejora, sin embargo, ligeramente la previsión para 2012: se contempla una caída del 1,5% de la actividad frente al 1,7% anterior. El ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, admitió ayer que "no es ganar mucho", pero también recalcó que la recesión de 2013 será "más suave" que la actual. Rechazó que los datos que se manejan sean optimistas, ya que el Gobierno está haciendo "un ajuste muy fuerte en España" y unos presupuestos "para no agudizar la recesión".

En lo que se refiere a la tasa de paro, empeoró tres décimas el dato de 2012 hasta el 24,6%, y otra décima el de 2013, hasta el 24,3%. Por contra, fijó unas mejores perspectivas para 2014 (del 23,3% frente al 23,4% anterior) y para 2015 (del 21,8% frente al 22,3%).

En cuanto al techo de gasto ascenderá a 126.792 millones, con un alza del 9,2% respecto al año anterior, aunque los ministerios verán mermado su presupuesto el 12,2%. Montoro explicó que la subida se debe a que en 2013 habrá que pagar una "fuerte carga" de intereses (9.114 millones) como consecuencia de la deuda pública.

Además, dijo que la aportación del Estado a la Seguridad Social es superior al ejercicio pasado (6.683 millones) para poder atender las obligaciones del sistema. De aquéllos, 4.628 millones corresponden al abono de las pensiones no contributivas, complemento de mínimos y protección familiar, 235 a dependencia y 19 a otras aportaciones.

Montoro destacó que, por primera vez, el techo de gasto tiene consecuencias en las comunidades porque van a trabajar con estos datos para establecer sus límites. Además el Gobierno ha previsto que éstas consigan un superávit del 0,2% del PIB en 2015 frente al equilibrio presupuestario que les presuponía hasta ahora. Por su parte, en 2013 la Administración Central podrá tener un déficit del 3,8% frente al 2,5% previsto, mientras que las comunidades podrán tenerlo del 0,7% frente al 0,5%.