El alcalde de Sevilla, el socialista Alfredo Sánchez Monteseirín, da por zanjada la posible ruptura del pacto de gobierno por parte del Grupo municipal de IU provocada por la quiebra entre ambas formaciones y posterior moción de censura protagonizada en La Algaba. El alcalde señaló ayer que en la capital, y a su juicio, "nunca hubo caso".

En una entrevista concedida a Europa Press, Monteseirín recordó, "a toro pasado", que desde el primer momento garantizó, como alcalde, la gobernabilidad de la ciudad al margen de los conflictos que pudiera haber entre los responsables de las organizaciones políticas y que, en ese sentido, confía "mucho en el sentido común de ambas organizaciones".

El primer edil remarcó que "uno de los grandes valores" aportados por parte del gobierno es la "cohesión", independientemente de los propios planteamientos de ambas formaciones. "Somos gente muy diferente pero responsables, e institucionalmente hemos puesto por encima de los legítimos intereses de partido los de la ciudad", subrayó. Según el alcalde, la singladura no ha afectado a "ese valor tan extraordinariamente importante que supone para Sevilla un gobierno absolutamente cohesionado dentro de su diversidad".

"Me ha preocupado más que no hubiera interferencias de la lucha partidaria en lo que supone la gobernanza, y entre unos y otros lo hemos conseguido", aseveró el primer edil. Este objetivo, según Monteseirín, se ha logrado "trabajando mucho, en definitiva, para dejar aparte las diferencias y poner en alza las coincidencias, renunciando en beneficio de la gobernabilidad las cuitas partidarias, que existen, pero en un segundo plano con respecto al primer plano, que es que estamos aquí para gobernar la ciudad y para responder a las exigencias de la ciudadanía".

El pasado mes de julio, el portavoz municipal de IU, Antonio Rodrigo Torrijos, explicó que el acuerdo de gobierno que une a PSOE e IU en el Ayuntamiento de Sevilla "goza de buena salud" y "se está cumpliendo ampliamente", si bien reconoció la existencia de momentos de falta de "sintonía" entre los socios de gobierno.

En ese sentido, atribuyó al PSOE unos "presuntos incumplimientos" entre los que destacó el más reciente, la "quiebra" de la "decisión de gobierno" que habría de mantener como suelo singular industrial los suelos de la antigua factoría de la multinacional gala Altadis.