La Policía Local precintó tres locales en la madrugada del domingo dentro del dispositivo de seguridad de la ciudad que se intensifica particularmente los fines de semana y que se diseña con la participación del Servicio de Extinción de Incendios y Salvamento, Bomberos de Sevilla, Protección Civil y Emergencias sanitarias EPES 061 así como con la colaboración de residentes y distritos municipales.

La primera actuación desarrollada por efectivos de la Línea Verde tuvo lugar pasada la medianoche en un local ubicado en la calle Resolana donde se comprobó la venta de bebidas alcohólicas dirigidas al consumo en el exterior del establecimiento, motivo que conllevó el cierre. Nuevamente, este fin de semana los agentes visitaron diferentes locales la Calle Pérez Galdós. Durante la jornada del viernes se abrió expediente sancionador a uno de ellos por diferentes infracciones, según informó en un comunicado el Ayuntamiento. En la jornada del sábado se realizó una nueva visita en la que se constató que en el mismo local comercializaba alcohol para consumo fuera del recinto que ocasionaba la acumulación de público en la vía pública, por lo que se procedió a la clausura.

El tercer local clausurado se encuentra en la calle Esperanza de Triana, donde los agentes acudieron tras la llamada de los vecinos. En la inspección correspondiente, detectaron que el establecimiento incumplía medidas de seguridad relacionada con los extintores de incendios, que se encontraban caducados, la comercialización de productos y funcionamiento de reproductores de música sin licencia o la ausencia de seguro obligatorio, por lo que ha sido desalojado y se ha procedido al cierre.

Paralelamente, durante el sábado se procedió a la realización de 115 pruebas de alcoholemia a conductores de las que tres resultaron positivas con sanción administrativa, una de ellas relacionadas con un siniestro vial. También se desarrollaron tres test relacionados con el consumo de drogas de los que uno ha resultado positivo por cannabis con sanción administrativa. En la madrugada del domingo, se llevaron a cabo 177 pruebas de alcoholemia con cuatro sanciones en el ámbito administrativo, dos de ellas relacionadas con siniestros viales, junto a una sanción de carácter un penal. También se practicaron tres test de drogas con un positivo.

El delegado de Gobernación y Fiestas Mayores, Juan Carlos Cabrera, destacó la coordinación de efectivos y la atención a residentes "en la revisión de las condiciones de los locales y el ajuste de su actividad a sus condiciones y licencias para garantizar los derechos de los consumidores y asegurar el derecho al descanso de los vecinos".