El secretario de un juzgado de Instrucción de Sevilla denunció el pasado miércoles la sustracción de otro ordenador portátil, el cuarto que desaparece en la sede judicial del Prado de San Sebastián. En esta ocasión, los ladrones usaron el mismo modus operandi empleado en los hurtos anteriores, por cuanto irrumpieron en el despacho del secretario y, tras forzar el armario donde se hallaba el portátil, se hicieron con el mismo sin que los servicios de seguridad del edificio se percataran de la sustracción.

La denuncia de este nuevo robo de un ordenador portátil ha motivado el inicio de una investigación judicial, aunque los tres supuestos anteriores los jueces acordaron el archivo de la denuncia por falta de autor conocido.

Los portátiles que han sido robados fueron entregados hace unos seis meses por la Consejería de Justicia para la realización de diligencias fuera del edificio judicial, tales como los levantamientos de cadáveres o cualquier otra intervención que tuviera que realizarse en la calle. En esta ocasión, el ordenador sustraído ni siquiera había sido estrenado. Entre los secretarios de los juzgados de Sevilla, hay algunos que están dispuestos a pedir a la Junta que no reponga el ordenador desaparecido para evitar nuevos robos.

Las nuevas sustracciones se suman a una larga lista de robos que han quedado impunes en los últimos años, sin que se haya adoptado una medida de seguridad como la implantación de cámaras en los pasillos de la sede judicial.