La Caravana Abriendo Fronteras llegó ayer por la tarde procedente de Madrid a Sevilla, donde medio millar de personas se concentraron para reclamar los derechos de las personas migrantes. La caravana tiene como objetivo denunciar el "estado de parálisis" que los gobernantes españoles viven respecto a refugiados y migrantes. La concentración en Sevilla comenzó a las puertas del Parlamento de Andalucía y concluyó en la Alameda.

Abriendo Fronteras protesta por el incumplimiento de los compromisos de acogida, la desprotección de menores no acompañados, la existencia de los CIE (centros de internamiento de extranjeros), la explotación laboral de porteadoras en la frontera o las devoluciones en caliente. Además, critican las declaraciones del ministro de Interior, Juan Ignacio Zoido, sobre las ONG que rescatan en el Mediterráneo y negociando a la baja la acogida de refugiados.

La caravana salió a las 12:00 de Madrid hacia Sevilla, para iniciar la primera de sus acciones reivindicativas. Hoy domingo, después de hacer su parada en la capital hispalense, se dirigirá a Algeciras y Tarifa (Cádiz), donde se ubica el CIE con las "peores condiciones" para los internos e internas.

Por último, el 17 de julio llegará a Málaga, para cruzar desde allí hasta Melilla, donde las acciones reivindicativas se concentrarán hasta el 21 de julio, para cruzar de nuevo el Estrecho rumbo a los invernaderos de Almería.

En Madrid, los participantes realizaron una cadena humana desde el Congreso de los Diputados hasta los autobuses de salida en la Plaza de Neptuno, para protestar por la vulneración de los Derechos Humanos que se comete en la Frontera Sur, según informaron los impulsores de esta iniciativa.