Fernando III fue el primer y mayor devoto de la Virgen de los Reyes que ha existido en Sevilla. Así se explica que la culminación de los cultos que se le dedican a la Patrona sea la exposición del cuerpo momificado del Rey Santo. La leyenda cuenta que ésta se le apareció en un sueño y le prometió que reconquistaría la ciudad. Así fue, y desde entonces, por deseo del rey, su cuerpo incorrupto y la imagen que soñó no se han vuelto a separar. Han pasado siete siglos y los dos patrones de Sevilla permanecen juntos en la Capilla Real de la Catedral.

Son muchos los sevillanos que acudieron ayer a la Catedral para rendir culto a su Patrón. El acto comenzó a las 08:30 con una misa, después de la cual los asistentes formaron una fila que salía de la capilla, para acercarse al féretro. Ana Ortiz llegó pronto con sus hijas para asistir a la misa: "Siempre venimos a la procesión del día 15, pero es la primera vez que venimos el 22. Este año hemos ido al primer y al último día de la octava, hemos podido ver cómo se abre la urna y los honores de los militares, ha sido todo muy bonito". Para Pepa Casado no ha sido una novedad, sino retomar una tradición: "Venimos a misa en la Catedral bastante a menudo, pero no veíamos a San Fernando desde hacía muchos años. La verdad es que nunca lo había visto tan bonito como hoy". Su amiga Olvido Guerrero se estrenó ayer en esta visita: "Tenía muchas ganas de venir y qué mejor manera de empezar la mañana que con una misa".

Los hermanos de la Asociación de Fieles de la Virgen de los Reyes y San Fernando vienen por devoción siempre que se descubre su cuerpo incorrupto, que es cuatro veces al año. Las fechas señaladas, aparte de ayer, son el 14 de mayo, que conmemora su traslado a la nueva urna en 1729, el 30 de mayo, por ser su onomástica y el día de su entierro, y el 23 de noviembre, festividad de San Clemente, cuando se recuperó la ciudad de Sevilla. El prioste de la asociación, Federico Carrasco, comentó que este año ha habido mucha gente: "Estamos muy contentos con la asistencia y con cómo se han desarrollado todas las celebraciones". María del Carmen Rangel, una gallega que lleva más de 40 viviendo en Sevilla, es una de sus devotas más fieles. "Hemos rezado el rosario desde las ocho de la mañana, la homilía ha sido especialmente bonita".

Los novatos y turistas también han hecho acto de presencia desde primera hora. Manuel Domínguez y su mujer han ido por primera vez para llevar a sus nietos pequeños. Han aprovechado la ocasión porque su hijo, y padre de los niños, es uno de los guardias del ejército. "Al mayor le ha gustado mucho, pero el pequeño ha tenido un poco de miedo". Una pareja de italianos, un poco confundida, buscaba con fervor en una guía turística. La familia White, del Reino Unido, intuyó que "tenía que haber algo especial, por todos los hombres con armas que hay". Se referían a los que custodiaban la urna, el Regimiento de Guerra Electrónica del Ejército de Tierra, formado por ingenieros, de quienes San Fernando es también patrón.