La Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) ha resuelto admitir inicialmente a trámite el recurso presentado conjuntamente por ocho asociaciones vecinales del centro histórico de Sevilla con la finalidad de impugnar la ordenanza municipal de circulación de peatones y ciclistas, aprobada por el Pleno del Ayuntamiento en septiembre de 2007. Será la Sección Tercera de la Sala la que se haga cargo de tramitar el proceso, según el escrito remitido a los demandantes: las asociaciones vecinales del Museo y entorno, El Arenal, Santa Cruz, Casco Histórico, Puerta Osario y entorno, Pumarejo-San Luis, Colectivo Alfalfa y Estación de Córdoba. La Sala del TSJA previene del archivo de las actuaciones si en diez días no se justifica el pago de la tasa y si la procuraduría, ejercida por el presidente de la asociación de vecinos del Museo y su entorno, Manuel Antonio Ruiz-Berdejo, no acredita su representación.

El recurso de impugnación pretende que la ordenanza municipal recoja más sanciones para las infracciones de los conductores de bicicletas. Los demandantes aseguran que la ordenanza contradice la Ley de Tráfico y el Real Decreto de 2003 porque no tiene en cuenta el nivel de alcoholemia de los conductores de ciclos. En el recurso también se denuncia el libre paso de bicicletas por las aceras y se mencionan fallos del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco donde se condena este hecho "al reconocer que el acerado debe ser para el peatón y que no puede haber en él vehículos de dos o cuatro ruedas".

Los vecinos que han apoyado el recurso son los mismos que desde la aprobación plenaria de la ordenanza han criticado que la ordenanza incluya en su texto el cierre del tráfico particular para todo el casco histórico de la ciudad, una medida cuya aplicación se ha paralizado mientras no funcione el Metro y haya más aparcamientos en el entorno del centro.

El Ayuntamiento se comprometió recientemente con los comerciantes de Sevilla (Aprocom), según la versión hecha pública por este colectivo, a suavizar los criterios de la ordenanza de circulación de peatones y ciclistas con medidas tales como la paralización del proceso de expropiación de los parkings del centro hasta tanto no se cuente con las infraestructuras adecuadas para facilitar el transporte de ciudadanos hasta el casco histórico.