La Unidad de Columna del Servicio de Traumatología del Hospital Virgen Macarena de Sevilla ha resuelto durante este mes hasta cuatro intervenciones quirúrgicas de alta complejidad con el objetivo de resolver el disbalance (desequilibrio) de la columna vertebral que padecían los pacientes. En concreto, se habla de disbalance cuando la columna vertebral no está derecha ni aplomada. Para lograrlo, el equipo que dirige el especialista Manuel Rovira ha utilizado dos complicadas técnicas, la de Ponte y la de Thomasen, que han permitido la recuperación del equilibrio de la columna vertebral de los pacientes. En su consecución ha sido necesario cortar en forma de cuña las vértebras para enderezar y equilibrar la columna. El corte de la vértebra, al alojar la medula espinal, implica una precisión máxima para no dañar estos tejidos.

Además del riesgo de lesión medular, existe el riesgo de sangrado, ya que se puede perder entre 2,5 y 3 litros de sangre al realizar esta intervención. Con el fin de evitarlo, los profesionales han utilizado un recuperador de la propia sangre del paciente y han monitorizado la función de la médula.