Sevilla

Zoido suspende en VPO y limpieza y aprueba en transporte y colegios

  • En seis meses de gestión, el alcalde del PP logra 0,5 puntos más de valoración que su antecesor, el socialista Sánchez Monteseirín · Sólo los vecinos de Los Remedios, Nervión y Triana opinan que la ciudad ha mejorado.

Los ciudadanos han dado su opinión sobre los seis meses de gestión del nuevo gobierno del PP de Juan Ignacio Zoido, que tomó posesión del cargo de alcalde el pasado 11 de junio. El último Barómetro Socioeconómico de la Fundación Antares, su edición décimotercera realizada en diciembre de 2011, refleja en líneas generales un suspenso en la gestión del Ayuntamiento de Sevilla a la limpieza de la ciudad (4,8) y a las viviendas de protección oficial (VPO), los aspectos peor valorados. Por contra, aprueban con un "bien" el transporte público (6,3) y los centros de enseñanza (5,9), mientras se da un "aprobado" a los servicios sociales (5,7), los parques y jardines (5,6), y la seguridad ciudadana (5,2).

Los resultados que obtiene Zoido están 0,5 puntos por encima de los que obtuvo el gobierno anterior. Antonio Pascual, director del Centro Andaluz de Prospectiva, el organismo que elabora el barómetro, destacó ayer que los ciudadanos otorgan medio punto más a la gestión de Zoido, en comparación con la de su antecesor, Alfredo Sánchez Monteseirín (PSOE), en coalición con IU.

Al valorar la situación global de la ciudad, más de la mitad de los encuestados (54,9%) opinan que "la situación global de la ciudad no se ha visto modificada en los últimos seis meses" del gobierno del PP, frente a un 21,3% que cree que sí ha mejorado y un 20,3% que opina lo contrario: que ha empeorado. Cuando se cumpla un año de gestión de Zoido, estas aparentes contradicciones probablemente habrán desparecido de la encuesta.

En un análisis por distritos, los vecinos más convencidos de que la situación de la ciudad ha mejorado en estos seis meses son de los Los Remedios (45%), Nervión (30%) y Triana (27,5%). En el extremo contrario se posicionan los encuestados de la Macarena, que opinan que ha empeorado. En las demás zonas la opinión mayoritaria es que todo sigue como antes.

Como cada año, la consulta se ha realizado a 440 personas mayores de 18 años de los 11 distritos de Sevilla por entrevista telefónica entre los días 12 y 16 de diciembre. El nivel de confianza de la muestra es del 95,5%.

El paro preocupa más

Al abordar los problemas que más les afectan, los encuestados citan el paro en primera posición (para el 36,8% de los entrevistados). Así viene sucediendo en los últimos cuatro años, desde que arrancó la crisis económica. El tráfico se cita como segundo problema (12,1%), seguido por la limpieza, la inseguridad ciudadana, el transporte público y los aparcamientos.

La preocupación por el paro ha crecido cuatro puntos respecto al porcentaje obtenido en el barómetro de junio pasado. Por primera vez los jóvenes de 18 a 34 años son el tramo de edad que citan el desempleo en mayor proporción (48,1% de los encuestados de esta edad) y lo colocan en la primera posición de sus problemas. Pascual señala este punto como una de las mayores sorpresas del sondeo, ya que en los últimos cuatro años los jóvenes no mostraban una preocupación tan marcada. "Me sorprende que el 48% de los jóvenes opinen que el paro es la situación que más les afecta, porque es la generación que tiene que lidiar con el futuro y en cuatro años el panorama laboral se ha deteriorado terriblemente", declaró ayer el director del Centro Andaluz de Prospectiva.

En las personas de 34 a 54 años, la preocupación por el desempleo es algo menor: el 40,1% lo cita como primer problema. En la población de 55 años en adelante, sólo el 24,5%.

Diez de los 11 distritos nombran el paro en primer lugar, y sólo el distrito Casco Antiguo se queja de la falta de limpieza como primer problema. Sobre cómo afecta este problema en el entorno familiar, el 60% confiesa que alguien de su entorno está parado. El porcentaje sube al 70% en los distritos Macarena Norte, Sur, Cerro-Amate,Este-Alcosa-Torreblanca, Macarena y Palmera-Bellavista. La menor proporción de afectados (42,5%) se da en Los Remedios, Casco Antiguo y Nervión (50% en ambos).

Políticos y sueldos

Al hablar de las medidas de ahorro para disminuir el gasto público, los encuestados se decantan en mayor porcentaje por reducir el salario de los políticos (18%), reducir el número de cargos públicos, austeridad en la Administración pública y eliminar los coches oficiales. Otras sugerencias que se incluyen en la lista por orden de importancia: eliminar tarjetas de crédito de cargos públicos, reducir la iluminación y la decoración navideñas, controlar fraudes fiscales, reducir el gasto en obras innecesarias, y controlar las ayudas y subvenciones.

Como deseos del año 2012, los ciudadanos aspiran a un trabajo (46,9%), a una ciudad más limpia, a tener más red de transporte público, a más seguridad ciudadana, a un mejor estado de las calles y del tráfico y al impulso de la economía. El pesimismo es general sobre el nuevo año y un 34,1% cree que empeorará la situación.

El PSOE municipal, principal grupo de la oposición del Ayuntamiento, considera "pobre" la mejora de medio punto que otorgan los ciudadanos al gobierno municipal del PP. Frente a la victoria por mayoría absoluta de Zoido, los socialistas creen que el alcalde Zoido "comienza a perder gancho y acusa el desgaste del PP en el gobierno por incapacidad de gestión y manifiestos incumplimientos de lo prometido, además de por una falta de presencia del primer edil en los temas de calado de la ciudad".

Los socialistas destacan que el 54,9% de los encuestados piensen que nada ha cambiado en la ciudad desde junio, el segundo argumento del "suspenso" de Zoido. Consideran absolutamente normal y comparten "el suspenso del PP" en vivienda pública cuando Zoido "ha dado por finiquitado el Plan Municipal de Vivienda, no ha presupuestado una sola obra nueva en 2012 y eliminó Otainsa paralizando proyectos como la rehabilitación como viviendas sociales de dos fincas de la Encarnación". Para bajar el paro, el PSOE reitera la urgencia de un plan de choque para las 3.500 familias sin sueldo ni ayudas públicas.

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