El portavoz del Grupo municipal del PP en el Ayuntamiento de Sevilla, Juan Ignacio Zoido, reclamó ayer al alcalde, Juan Espadas, que los presupuestos municipales de 2016 tengan como punto de partida la "continuidad de la racionalización del gasto y la reducción de la presión fiscal que tan buenos resultados ha dado". El líder popular basa su petición en el informe de liquidación del ejercicio de 2014, en el que, según Zoido, la Intervención General del Consistorio recomienda seguir "la línea marcada" durante los últimos cuatro años en materia presupuestaria .

El ex alcalde pidió a Espadas, después de reunirse con el resto de concejales de su grupo , "celeridad y respeto por los plazos" a la hora de elaborar y aprobar los próximos presupuestos. Zoido añadió que "van a estar vigilantes y van a ser exigentes" para que se hagan antes de final de año ya que, "en su mandato como alcalde se aprobaron antes del 31 de diciembre" y "se empezaron a tratar a primeros de septiembre". Según aseguraron los populares, actualmente "no tienen constancia de que se hayan iniciado las actuaciones iniciales de preparación del presupuesto". Sin embargo, fuentes del gobierno municipal aseguraron ayer que ya están trabajando en el presupuesto de 2016 y que están ajustando a la realidad la partida de ingresos, el IBI y las vacantes.

Zoido, además, subrayó que espera que no ocurra como en gobiernos socialistas anteriores "en los que los presupuestos se aprobaron de manera definitiva en mayo (2009) o en junio (2010), ya que "implicarían una absoluta irresponsabilidad y tendría unas consecuencias nefastas y perjudiciales para el funcionamiento del Consistorio". A estas peticiones, el portavoz sumó el mantenimiento de la prestación de los servicios públicos de calidad y la continuidad de la línea de racionalización del gasto que permita una reducción de la presión fiscal, sustentándose en el informe de liquidación presupuestaria de 2014. Según el PP, el Interventor "pide"que se continúe con la línea marcada en los últimos cuatros años "para no llevar al Ayuntamiento a una situación de desequilibrio financiero y contable". El interventor recomienda que se mantengan, para el ejercicio de 2015, "las medidas de contención del gasto y sostenimiento de ingresos, algo que, de acuerdo con los populares, "evitaría tener que acudir a financiación a corto plazo mediante operación de préstamos, algo que en estos años no ha sido necesario".

Este informe, consultado por este periódico, aconseja que los presupuestos próximos cuenten con "un mayor grado de ajuste en ingresos a las posibilidades recaudatorias" para "determinar los gastos de los que dispone la entidad para prestar los servicios públicos que le son competencia". Es decir, que las previsiones que se hagan de los ingresos a cobrar por parte del Ayuntamiento se ajusten más a la realidad. Y es que en ejercicio de 2014 había una previsión de ingresos de 907.091.232 euros, de los cuales 830.910.777 fueron derechos reconocidos, pero al final se recaudaron sólo 643.108.817 euros, lo que supone que quedaron pendientes de cobro 187.801.959 euros. Esta "inflación" de las previsiones es lo que lleva al Interventor a solicitar un ajuste de los ingresos para obtener un resultado equilibrado en la ejecución de los gastos.

Según el informe de liquidación de 2014, el Ayuntamiento sevillano acumula desde antes de 2009 hasta 2014 unos "derechos de difícil o imposible recaudación" que ascienden a 480,4 millones de euros. Resulta especialmente llamativo el año 2014, con 187 millones de difícil cobro por previsiones de ingresos al margen de la realidad recaudatoria.