El Ayuntamiento de Sevilla aclaró ayer a preguntas de este periódico que un 38,6% de las actas abiertas este fin de semana a bares y restaurantes de la Alameda de Hércules lo han sido por asuntos relacionados con la autorización de veladores. De los 44 expedientes abiertos, a raíz de la inspección de 61 negocios por los agentes de la Policía Verde, un total de 17 se deben a cuestiones relacionadas con las autorizaciones de veladores: en concreto, 11 actas abiertas porque el propietario del establecimiento no presentó la licencia de ocupación de la vía pública en el momento de la inspección, otras tres actas por no presentar la licencia de veladores en el momento de la inspección y tres actas abiertas por exceso de veladores.

Los 27 expedientes restantes son en su mayor parte por no presentar el último recibo abonado del seguro de responsabilidad civil y, en menor medida, por no presentar en el momento la licencia de apertura.

De las 44 actas abiertas este fin de semana en el bulevar, 17 son por cuestiones de veladores La asociación de bares y restaurantes critica que el Defensor ni se reunió con ellos para su informe

La inspección de los agentes de la Policía Verde se realizó el pasado fin de semana. Según ha podido saber este periódico y confirmaron ayer algunos bares, los establecimientos se avisaron unos a otros de la presencia de estos agentes y los que pudieron guardaron en el interior de sus locales las mesas y sillas no autorizadas para evitar ser expedientados. Eso explica que sólo se hayan abierto tres actas por el exceso de veladores.

La asociación de bares y restaurantes de la Alameda (Asebre), que agrupa a 73 establecimientos, se quejó ayer de que se hable en la prensa de 44 infracciones abiertas cuando buena parte de ellas son actas abiertas por no tener en ese momento el recibo del seguro de responsabilidad civil, y acusa al Ayuntamiento de retrasar la concesión de licencias de veladores a los bares o la renovación de esta, razón por la que muchos establecimientos no disponían aún de ella.

"Nos están machacando al pequeño y mediano comercio con inspecciones todas las semanas y no hacen nada con las denuncias que hemos presentado por los yonquis que se concentran en el centro de la Alameda, molestan al público, se drogan, insultan y amenazan a los clientes y nos roban. Eso no lo dicen, pero la inseguridad en la Alameda la sabe el distrito y el delegado Antonio Muñoz", lamenta Walter Soler, presidente de la asociación.

Desde el Ayuntamiento se aseguró ayer que este fin de semana se efectuaron también controles relacionados con la seguridad ciudadana además de los centrados en los permisos de los establecimientos.

"Es una decisión política de ir a por los bares de la Alameda. No es justo para los que estamos trabajando aquí todo el día. Los responsables de los bares no quieren hablar por miedo a represalias del Ayuntamiento y de la Policía", agrega Soler, quien explica que en su negocio paga 3.000 euros al año por los veladores que tiene y que con sus dos establecimientos da empleo a 22 trabajadores.

El control de veladores por parte del Ayuntamiento ha llegado este fin de semana a la Alameda casi un año después de la denuncia que publicó este periódico el 4 de septiembre de 2016, denuncia de la que se hizo eco la Oficina del Defensor del Pueblo Andaluz, que abrió dos quejas de oficio sobre el problema de los ruidos y veladores en la Alameda.

La asociación de bares y restaurantes criticó ayer que el Defensor ni siquiera se reunió con ellos para elaborar su informe y sus conclusiones.