Un milagro en el aeropuerto en el Aeropuerto de Sevilla. Un Guardia Civil de Servicio, junto con una doctora que se encontraba en el pasaje del vuelo a Malta un trabajador de Aena, lograron revertir una parada cardiorrespiratoria de un pasajero que se disponía a coger un vuelo a Malta.

Los hechos ocurrieron cuando el pasajero de origen maltés y de 64 años iba a coger el vuelo de regreso a Malta junto con su mujer y se desvaneció en los pasillos de preembarque de la terminal entrando en parada cardiorrespiratoria.

En ese momento, un trabajador de Aena que se encontraba en la zona acudió al lugar donde una pasajera médico de profesión practicaba ya las primeras maniobras de reanimación y donde también acudió un agente de la Guardia Civil que se encontraba en el filtro de seguridad del aeropuerto y que también colaboró en la reanimación, según ha relatado el cuerpo armado en un comunicado.

Una vez allí, tras las primeras maniobras de reanimación realizadas por la doctora, el guardia civil y el trabajador de Aena se relevaron en las tareas de reanimación, pero ante la falta de respuesta al mismo estimaron necesario recurrir al uso del desfibrilador ubicado en la sala de embarque, por ser zona cardiosegura. El agente se encargó de traerlo y colocar los parches, mientras la médico controlaba el estado del pasajero desvanecido.

Finalizada la colocación de los elementos necesarios, activaron el desfibrilador sin que en un primer momento se revirtiera la parada consiguiéndolo al al segundo intento.

Los actuantes se quedaron junto con el pasajero y su acompañante hasta que llegaron las primeras asistencias sanitarias, tanto el médico del aeropuerto como, posteriormente, el 061 que lo trasladó, ya consciente, al hospital Virgen del Rocío.

La Guardia Civil ha destacado que el propio personal sanitario expresó que la rápida y firme actuación habían sido claves para conseguir salvarle la vida.