La cuarta ola del Covid-19 es ya un hecho inevitable. Tras varios días de aumento paulatino en el número de hospitalizados, los datos de contagios registrados hoy evidencian el irremediable estallido de un nuevo embiste de la pandemia en la provincia de Sevilla. Los 593 positivos confirmados por la Consejería de Salud y Familias de la Junta en las últimas 24 horas suponen un nuevo tope en esta nueva fase de la pandemia. Y es que, la última vez que se registró en un día una cifra cercana a los 600 nuevos contagios fue a mediados de febrero, cuando el pico de la tercera ola empezaba a remitir. 

Hasta este momento, y tras unas tres primeras semanas de marzo en las que la provincia se instaló en una especie de meseta por debajo del umbral de los 200 contagios al día, desde el pasado día 25 de ese mes la tendencia empezó a ser notablemente diferente. Dejando al margen, lógicamente, las notificaciones del pasado miércoles 31 de marzo (360), pues un día antes se anunció el enésimo problema en el sistema de conteo de los casos; y la del pasado sábado 3 de abril (873), dado que la cifra fue la acumulada del Jueves y Viernes Santo, el número más elevado estaba establecido en los 311 casos que se confirmaron el pasado sábado 27 de marzo, cifra que ahora ya queda atrás y marca la clara línea de aumento de positivos en la que ha entrado la provincia, que ya suma 109.081 infectados desde el inicio de la crisis, 108.185 si sólo se tienen en cuenta los diagnósticos confirmados con pruebas PDIA.

Los casos activos llegan hoy hasta los 22.306 tras sumar 180 más. La tasa que mide el indicador a 14 días sufre un nuevo repunte de hasta 15 puntos, ya que asciende de 153,1 a 168,4 casos por 100.000 habitantes, es decir, se mantiene en el nivel alto de alerta por contagio que se alcanza al superar el umbral del índice de 150 casos.

Un problema que se acrecienta sobremanera teniendo en cuenta la también escalada en la cifra de hospitalizados. El parte de este miércoles de la Junta de Andalucía contabiliza 45 ingresos más, de los que cuatro han sido en la Unidad de Cuidados Intensivos. También son cuatro los fallecimientos notificados por Salud por lo que la cifra total de víctimas asciende hasta las 1.853.

Desde el pasado mes de febrero de 2020, cuando el coronavirus irrumpió en la provincia, han sido 8.943 sevillanos los que han pasado algún día en un hospital, 850 en las UCI. A fecha de 7 de abril, en la provincia se encuentran hospitalizados 278 personas, de las que 66 están en la críticos.

Y todo esto en un momento en el que el avance de la inmunización de la población no progresa al ritmo deseado. La provincia encara la cuarta ola epidémica con menos del 6% de la población inmunizada. Aunque el efecto de la vacuna ha llegado ya a algo más del 18% de los sevillanos -por ahora, 358.399 personas-, sólo han alcanzado la inmunidad el 5,9%, que abarca a 117.077 ciudadanos. No obstante, la comunidad médica sí vaticina que esta última onda tendrá un menor impacto en los hospitales, precisamente gracias a esa inmunidad alcanzada, sobre todo, en colectivos de riesgo, pero sí hay que tener en cuenta que la coexistencia de una nueva escalada de contagios y el aumento en la llegada de los sueros supondrá una nueva sobrecarga en la estructura asistencial.

Pero como todo no van a ser datos negativos, la cifra de curados también continúa al alza cada día. Aunque por debajo del número de nuevos positivos por primera vez en un mes, las 410 altas dictadas en las últimas horas suponen alcanzar un porcentaje de curados del 77,8% que en términos absolutos se corresponden con un total de 84.922 recuperados.