Denuncian la calidad de la comida servida a policías desplegados en Sevilla durante la cumbre de la ONU: "El catering de los horrores"

La polémica ha estallado en el marco de la IV Conferencia Internacional sobre Financiación para el Desarrollo organizada por la ONU en Sevilla, donde más de 7.500 agentes de la Policía Nacional y Guardia Civil han sido desplegados para garantizar la seguridad de un evento que reunirá hasta el 3 de julio a cerca de 70 jefes de Estado y representantes de 150 países.

Sin embargo, lejos de centrarse en cuestiones operativas, el foco mediático se ha desplazado a las precarias condiciones de alimentación que denuncian haber sufrido varios de estos agentes desde su llegada a Sevilla entre el jueves y viernes pasado.

El sindicato policial JUPOL, mayoritario en el cuerpo, ha sido el encargado en alzar la voz a través de sus redes sociales, donde ha publicado fotografías y vídeos que evidencian lo que califican como una “pésima calidad” de las comidas servidas por un catering.

En una de las imágenes, puede observarse un sándwich con apenas un par de hojas de lechuga y algo de mayonesa. “Ministro, esperamos que coma la misma ‘maravillosa’ comida que les están poniendo a algunos de los policías desplazados a la cumbre de la ONU”, ironizaba el perfil oficial del sindicato, en referencia al ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska.

En otra publicación, el sindicato difundió la imagen de una ración de tomate con moho que, según denuncian, fue servida a algunos agentes. “Hoy el Ministro del Interior Fernando Grande-Marlaska visita la IV Conferencia Internacional de Financiación para el Desarrollo. Imaginamos que almorzarán la misma comida que ofrecen a algunos de los policías desplazados, en este caso, tomate con 'bífidus'...”, añadieron con tono sarcástico.

A estas quejas se ha sumado también el Sindicato Unificado de Policía (SUP), que ha señalado el coste que se destina a las dietas: “Invitamos a cualquier ciudadano a hacer tres comidas por 28,21 euros”, denuncian, en referencia al presupuesto diario por agente.

"Improvisación y precariedad" en el dispositivo de seguridad

El malestar no se limita a la comida. Este viernes, JUPOL denunció también la “falta de planificación, la improvisación y la precariedad” que, aseguran, rodea al operativo de seguridad del evento internacional. A través de un comunicado, el sindicato lamentaba la imagen “lamentable” que, a su juicio, proyectará el Ministerio del Interior con una Policía sin recursos suficientes para garantizar su operatividad.

Entre las deficiencias más graves, JUPOL señala que la Dirección General de la Policía se ha negado a adelantar las dietas a los agentes desplazados, obligándoles a cubrir sus gastos sin respaldo institucional inmediato. Además, advierten de que las cantidades destinadas a dietas no se han actualizado en veinte años, lo que supone que un agente tenga que pernoctar por apenas 40 euros por noche, una cifra “absolutamente insuficiente” para una ciudad como Sevilla, especialmente en un contexto de alta ocupación hotelera.

Concentración sindical ante la ONU en Sevilla Este

Ante esta situación, representantes de los sindicatos JUPOL, JUCIL y JUSAPOL se han concentrado este lunes frente al Palacio de Congresos de Sevilla, sede del evento, para denunciar el “abandono institucional” de los cuerpos de seguridad del Estado.

Durante la protesta, la portavoz de Jupol fue especialmente contundente: “Por desgracia, el maltrato sistemático hacia los policías nacionales y los guardias civiles es continuo. Creemos que han debido contratar el catering para un campamento infantil, porque las cantidades son para niños de cinco años. Y no solo eso: sirven comida en mal estado. Tomates con moho… Llegamos al punto de que juegan con nuestra salud. Lo hemos bautizado como ‘el catering de los horrores’. Eso es lo que tienen que comer después de estar de plantón durante horas, con estas temperaturas. Nadie en este país merece este trato”, denunció.

Durante el fin de semana, JUPOL recordó que la capital hispalense se encuentra en plena ola de calor, con temperaturas superiores a los 43ºC, según alertó la AEMET. En una publicación en redes, el sindicato acompañó la denuncia con una imagen de dos agentes de servicio bajo el sol abrasador, calificando la actuación del Ministerio como propia de un país “tercermundista”.