Los maestros y profesores que sustituyen a otros docentes debido a bajas por enfermedad, u otros motivos, están tardando este año en percibir su nómina hasta dos meses más debido a la política de gestión salarial que desarrolla la Junta de Andalucía, que impide que estos profesionales cobren por su trabajo docente mensualmente.

Los sindicatos ANPE y FETE-UGT señalaron ayer a este periódico que desde hace años los docentes que sustituyen a otros durante una temporada -no los interinos- tardan casi dos meses en cobrar su primer sueldo. Este periódico se puso ayer en contacto con la Consejería de Educación, que no quiso ni desmentir ni confirmar este hecho. Por su parte, los representantes sindicales de estas organizaciones califican de "injusta" la situación de los sustitutos, ya que, a su entender, no hay razón para el retraso. Sonia Gaya, secretaria de Enseñanza de FETE-UGT, explica que esta "mala gestión" se debe a la fecha que establece la Administración autonómica para cerrar las nóminas. "Si un docente -ejemplifica- comenzó una sustitución el 8 de noviembre no cobrará su primer mes de trabajo hasta finales de año, lo que demuestra que la gestión salarial de la Junta es un desastre". Francisco Padilla, presidente de la ANPE en Andalucía, considera que la Junta lleva años practicando "un abuso con los sustitutos, que la realidad demuestra que son muy numerosos debido a las bajas que se registran".

No en vano, el presente curso se inició con casi 1.000 docentes de baja, lo que obligó a muchos centros educativos a esperar durante días, e incluso semanas, a los nuevos profesores y maestros. Una sustitución para la que la Ley de Educación Andaluza (LEA) recoge una fórmula que permite a los centros efectuarla en menos de 15 días, y que la Junta, sin embargo, aún no ha desarrollado.