Un cambio radical. El Ayuntamiento reurbanizará el entorno de la basílica de la Macarena para hacerlo peatonal. La Gerencia de Urbanismo invertirá 423.000 euros en crear una plaza en el espacio delantero del templo, eliminando el tráfico que existe en la actualidad. El proyecto, que dotará al lugar de una "nueva personalidad", fue presentado este miércoles a la hermandad, que lo ha acogido con los brazos abiertos tras muchos lustros de espera, puesto que esta reordenación ya estaba contemplada en el PGOU. Está previsto que la licitación se haga en mayo y las obras, con una duración de seis meses,  arrancarán tras el verano.

La reurbanización del entorno de la basílica de la Macarena es un viejo anhelo que fue, incluso, presentada en 2013 durante el anterior mandato municipal, con Juan Ignacio Zoido como alcalde, aunque se quedó guardado en un cajón por falta de presupuesto. Espadas ha rescatado el actual proyecto, redactado por los técnicos de Urbanismo a finales de 2014 que será realidad gracias a la disposición presupuestaria. La intención es acometer las obras tras el verano para que estén terminadas para la Semana Santa. La propuesta, a la que ha tenido acceso este periódico, supondrá un "cambio radical en la imagen actual  de la basílica y del Arco. "Se trata de crear un entorno mucho más amable y noble que realce ambos elementos".

El espacio actual no puede ser calificado como calle ni como plaza, además de que se ha perdido el trazado histórico con la muralla y el Camino de Ronda. El primer objetivo de esta actuación es eliminar el intenso tráfico y la presencia de vehículos estacionados. En segundo lugar, se dotará a la zona de un "pavimento digno" para crear una especie de plaza que recuerde al trazado de la muralla.

El espacio tendrá una plataforma única. La parada de taxis existente se desplazará hacia la Resolana, por detrás del carril bici, originando, de este modo, un espacio peatonal unitario con enlosado de granito que será colocado en diagonal.  Para evocar al antiguo  Camino de Ronda, actualmente la calle Bécquer, se remarcará en el pavimento el trazado en planta de la muralla.

 El proyecto contempla una serie de "barreras" visuales y conceptuales para separar la nueva plaza del tráfico rodado de la Resolana: el propio carril bici y una hilera de naranjos y bancos. Además, en la zona aledaña a la rampa de salida del arco y en el extremo de la parada de taxis, se crearán unos parterres con arbustos de poco crecimiento.

El proyecto contempla la eliminación de la entrada de tráfico desde la calle Bécquer a San Luis. Se mantendría únicamente el paso esporádico desde la calle Macarena por debajo del Arco hacia Doctor Fedriani y la calle Parlamento de Andalucía. Sí se permitirá la entrada puntual de vehículos al establecimiento de cambio de lunas existente. La reordenación final del tráfico está pediente del dictamen de Movilidad. La actuación dará continuidad a los acerados de las calles Resolana y Parlamento de Andalucía y se incluirá un arbolado para hacer "más amable" el tránsito. Todo el espacio peatonal estará dotado con la señalización conforme a la normativa para personas de visibilidad y movilidad reducida.

El hermano mayor de la Macarena, Manuel García, conoció el proyecto de manos del delegado de Urbanismo, Antonio Muñoz, y el gerente, Ignacio Pozuelo. García se mostró en declaraciones a este periódico muy satisfecho con una actuación que solucionará los conflictos existentes en la actualidad: "Estamos encantados. Creemos que esta peatonalización le va a dar todavía más vida a la zona y acabará con los problemas que hay ahora entre los coches y las muchas personas que visitan la basílica".

La Hermandad de la Macarena también acometerá en los próximos meses unas obras en el atrio de entrada a la basílica, dotándolo de una nueva solería y una reja acorde con el espacio que contribuirán también a mejorar la percepción del nuevo espacio peatonal.