Las elecciones generales de este domingo 28 de abril han truncado una reforma del carné por puntos que preveía endurecer el castigo por determinados comportamientos de riesgo de los conductores, entre los que se encuentra la utilización del teléfono móvil mientras se conduce, una conducta que iba a pasar a suponer la pérdida de seis puntos del carné frente a los tres actuales. Las estadísticas de la Dirección General de Tráfico (DGT) vienen alertando ya desde hace varios años de que ésta es una de las principales infracciones de los conductores y, en el caso de la provincia de Sevilla, las sanciones por utilizar estos dispositivos electrónicos se han colocado en segundo lugar en el número de infracciones, por delante incluso de la conducción bajo los efectos del alcohol y sólo superada por las multas por exceso de velocidad.

Según los datos facilitados a este periódico por la Jefatura Provincial de Tráfico de Sevilla, en todo el año 2018 fueron sancionados en la provincia de Sevilla un total de 7.643 conductores por utilizar el teléfono móvil mientras conducían un vehículo, lo que se tradujo en 7.833 sanciones que, a su vez, acarrearon la pérdida de 23.499 puntos del carné. Esta cifra de puntos detraídos a los conductores sevillano representa el 16,7% de los puntos totales retirados el año pasado, que en todas las infracciones ascendió a 140.881 puntos detraídos en ese periodo, como puede observarse en el gráfico estadístico que aparece junto a esta información.

Un control de tráfico de la Guardia Civil.

Según esta estadística, cada día son cazados con el móvil en la mano 21 conductores en la provincia de Sevilla, lo que muestra la incidencia de estas infracciones. Se trata de una tendencia que se repite en los últimos seis años, en los que el número de sanciones por el uso de estos dispositivos alcanzó las 45.798, a una media de más de 7.000 multas cada año y con un pico de 8.323 sanciones en el año 2013.

El mayor número de sanciones impuestas en 2018 correspondió, como suele ser habitual, a los excesos de velocidad, que costaron 16.241 multas a 15.768 conductores sevillanos y la retirada de 37.636 puntos. De este total de multas, 14.149 eran las más leves y llevaban la pérdida de dos puntos (por circular por ejemplo a velocidades de entre 141 y 170 kilómetros por hora en carreteras con el límite de 120); otras 1.607 supusieron la retirada de cuatro puntos para el infractor (por circular entre 171 y 180 en vías limitadas a 120); y las más graves, castigadas con seis puntos menos, fueron impuestas a 485 conductores que superaban los 181 kilómetros por hora en vías en las que no se podía circular a más de 120 kilómetros por hora.

45.798 sanciones. Ésta es la cifra de multas impuestas en Sevilla entre 2013 y 2018 por usar el móvil.

La tercera causa de sanción en la provincia es la conducción bajo los efectos del alcohol, que han ocasionado 5.342 sanciones y la retirada de 24.452 puntos del permiso de conducir. Los conductores sancionados por conducir bajo los efectos de las drogas están detrás de otras 2.253 multas, que han ocasionado la detracción de 13.518 puntos.

Por no llevar puesto el cinturón de seguridad o el dispositivo homologado en el caso de los niños han sido sancionados otros 4.832 conductores, que han perdido por este motivo 15.150 puntos.

Las estadísticas de Tráfico recogen asimismo otras 3.173 infracciones (12.692 puntos menos) por saltarse un semáforo; 685 por no respetar una señal de stop (2.740 puntos detraídos) y 584 multas a motoristas por no llevar el casco (1.752 puntos retirados).

Además, se detectaron 400 casos de conducción temeraria, que acarrearon la pérdida de 2.400 puntos, dado que estas sanciones se castigan con la retirada de seis puntos.