Un ladrón atacó con un cuchillo a un camarero de un bar de la Buhaira en el que intentó robar. La rápida intervención de la Policía Nacional evitó que el asaltante llegara a herir al empleado. El presunto autor de los hechos fue detenido y se le acusará de un delito de robo con violencia. El suceso ocurrió sobre las cinco y media de la mañana del 26 de diciembre en la cervecería La Buhaira, ubicada en la calle Doctor Ordóñez de la Barrera. El empleado estaba en ese momento abriendo el negocio.

Una patrulla del Grupo Operativo de Apoyo (GOA) de la Policía Nacional que prestaba servicio de paisano presenció los hechos. El patrullero estaba dando vueltas por la zona cuando vio un vehículo que le resultó sospechoso. Del coche se bajaron dos hombres y un tercero se quedó en el puesto del conductor.

Uno de los varones que se había bajado del turismo se acercó a la cervecería y, con un cuchillo jamonero de unos 25 centímetros de hoja, acometió contra el trabajador de forma violenta, dirigiendo el arma blanca hacia el rostro y el torso del empleado. El ladrón llegó a derribar al camarero, al que intentó apuñalar varias veces en el suelo. No llegó a clavarle el cuchillo porque llegaron los agentes de la Policía Nacional.

Mientras su cómplice forcejeaba con el camarero, el otro sospechoso se había metido en el bar e intentó sustraer la caja registradora del negocio. Al ver a los policías con su consorte, este segundo delincuente huyó a pie, dejando en el lugar un cuchillo de unos diez centímetros de hoja. El conductor del vehículo, que esperaba a los dos ladrones en la puerta del bar, también se dio a la fuga al percatarse de la presencia policial.

Los agentes se centraron en el delincuente que había atacado al camarero, al que nunca perdieron de vista y al que interceptaron en la calle Doctor Pedro de Castro. El sospechoso seguía con el cuchillo en la mano. Los policías le instaron a que lo arrojara al suelo, pero el ladrón hizo caso omiso de las indicaciones de los agentes. Éstos tuvieron que reducirlo a la fuerza y se incautaron también del cuchillo jamonero empleado por el delincuente.

El detenido tiene 38 años y su identidad es Félix M. B. Se trata de un hombre con varios antecedentes delictivos, vecino de las Tres Mil Viviendas. Tiene detenciones anteriores por varios delitos,como robos con fuerza en domicilios, robos con violencia a punta de navaja (lo que en el argot policial se conoce como sirlas) y también por agresión sexual.