En el andén del Ayuntamiento de Sevilla se hizo el silencio 20 años después. La corporación municipal, acompañada de otras personalidades políticas e institucionales, guardó un minuto de silencio a las 12:00 en memoria de Alberto Jiménez-Becerril y Ascensión Garcia, asesinados por ETA en la calle Don Remondo el 30 de enero de 1998.

El acto, que centró la atención de numerosos medios de comunicación y viandantes, estuvo presidido por una lona que colgaba del balcón del Consistorio con el la inscripción 20 años sin Alberto y Ascen. En la memoria todas las víctimas del terrorismo. Tras un caluroso aplauso que rompió el silencio al mediodía, comparecieron algunos de los presentes.

Teresa Jiménez-Becerril, hermana de Alberto y eurodiputada, fue contundente en sus declaraciones y recordó que "la verdadera derrota de ETA no llegará hasta que se esclarezcan los casi 400 asesinatos sin resolver". La eurodiputada popular recuerda aquel fatídico día de enero de 1998 con agradecimiento hacia los sevillanos, de los que afirma que a ellos "les dieron una puñalada esa noche". Rememora con gratitud como se echaron a la calle y acompañaron a la familia en unos días de los que se cumplen dos décadas.