Varios policías nacionales que no han obtenido medallas en el reparto de condecoraciones de este año y consideran que son merecedores de estas distinciones se están movilizando para realizar alguna acción de protesta durante la festividad de los Santos Ángeles Custodios, patrones del Cuerpo.

En Sevilla se realizará un acto en la plaza de San Francisco, aunque también se entregarán medallas a policías sevillanos en el acto que tendrá lugar en La Línea de la Concepción. Será allí donde se repartan todas las cruces al mérito policial con distintivo rojo, que acarrean una pensión del 10% del salario.

El reparto de medallas es un asunto polémico cada año y en la edición de 2018 se han quedado fuera de las mismas una serie de agentes que se jugaron la vida en sus intervenciones o que resultaron gravemente heridos en acto de servicio. Entre estos últimos destaca el caso de un agente que recibió un fuerte golpe en la cabeza propinado con la culata de una pistola cuando perseguía a un delincuente en Los Pajaritos.

A este agente se le solicitó la cruz al mérito policial con distintivo rojo por su trayectoria profesional, y no por el hecho concreto, pero lo cierto es que no ha recibido ni siquiera una cruz con distintivo blanco. En su trayectoria atesora más de 1.000 detenciones en los diez años que ha estado de servicio. Tras la intervención desarrolló una enfermedad neuronal grave.

Tampoco recibirá medalla uno de los agentes de Alcalá de Guadaíra que rescataron a una mujer en una cornisa, que ya el año anterior había salvado la vida a una niña que se había atragantado con un caramelo cuando veía la cofradía de la Sed. Por ninguna de estas intervenciones recibirá cruz alguna.

Otro caso que ha generado un profundo malestar entre los agentes es el de la Unidad de Prevención y Reacción (UPR). Sólo recibirá cruz un mando de esta unidad, pese a que se propusieron a 16 agentes que han estado meses destinados en Cataluña y en La Línea de la Concepción.

No recibirán medallas policías históricos como Cayetano, que fue durante tres años seguido el agente con más detenidos y que sobrevivió a un tiroteo, o el oficial Ricardo Morente, que esclareció decenas de homicidios, entre ellos el doble crimen de Almonaster, 18 años después de los hechos.

Tampoco están en la lista un agente del Grupo de Atracos que detuvo a Dani el Uruguayo, el asesino más peligroso que ha operado en Sevilla en los últimos años. Como tampoco lo hará la inspectora que esclareció la violación y asesinato del Parque de María Luisa.

El secretario general de la Unión Federal de Policía (UFP), Antonio Jurado, que pidió la medalla para estos dos funcionarios, afiliados a sus sindicatos, lamentó que sin embargo se entreguen más de 350 condecoraciones en toda España a personas que no son policías.

"Asistimos a un claro ejemplo de corrupción. Da vergüenza el reparto de medallas a personas ajenas al cuerpo, simplemente por favores, relaciones o los regalos que llegan en Navidad a las comisarías", denunció Jurado, para el que el día del Patrón es un "día negro" cuando debería ser una jornada festiva para los agentes. “Ha habido claras injusticias. Esta situación va cada año a peor”, dijo Jurado, que dejó claro también que hay policías condecorados que sí merecen las medallas con toda justicia.

La Policía distinguirá por ejemplo a los agentes que han participado en varias operaciones importantes. Es el caso de la comisaría de Dos Hermanas, donde se hará entrega de medallas a los policías que intervinieron en el triple crimen de Cerro Blanco y también a los agentes que detuvieron a diez personas presuntamente implicadas en el secuestro de un lotero, un suceso ocurrido en Montequinto el pasado mes de agosto.