Un avión de la aerolínea bangladeshí US-Bangla se estrelló en Katmandú durante el aterrizaje, posiblemente por un problema de comunicación entre la torre y los pilotos, causando la muerte de 49 personas en el peor accidente aéreo de los últimos 25 años en Nepal. El avión, un Bombardier Dash 8 que realizaba el trayecto desde Dacca con 67 pasajeros y cuatro tripulantes a bordo, se precipitó tras una confusión en la comunicación sobre la pista de aterrizaje, según fuentes del aeropuerto de Katmandú y de la compañía aérea. La aeronave derrapó en su aterrizaje y sufrió una fuerte colisión que provocó un incendio. Durante varios minutos las llamas provocaron una gran columna de humo mientras los equipos de socorro trataban de salvar a los pasajeros.

El portavoz de la Policía de Nepal, Manoj Neupane, indicó que al menos 49 personas murieron y 22 resultaron heridas, pese a que los operarios del aeropuerto consiguieron sacar a unas 30 personas del interior de la aeronave. Al menos nueve murieron en el hospital. El director general del aeropuerto Tribhuvan de Katmandú, Raj Kumar Chhetri, informó de que la investigación preliminar apunta a una confusión en la comunicación entre la torre y los pilotos del avión.

Chhetri dijo que la torre pidió al piloto que aterrizara por el lado sur del aeropuerto, llamado técnicamente pista 20, pero el piloto insistió en tomar tierra por el norte, por la pista 02. "Nuestras primeras averiguaciones muestran que el capitán dijo que se sentía cómodo aterrizando por pista 02, pese a que el controlador aéreo le dijo que no lo hiciera", señaló Chhetri, al indicar que examinarán la caja negra del aparato para determinar las causas reales del siniestro.

En Dacca, la compañía aérea afirmó que la información errónea mandada por la torre pudo ser causa de una negligencia fatal. "No estamos haciendo ninguna acusación, sospechamos que podría haber habido negligencia por la parte de Nepal", indicó el director ejecutivo de US-Bangla, Imran Asif.

En el avión había 67 pasajeros, 33 nepalíes y 32 bangladeshíes, un chino y un maldivo, además de los cuatro miembros de la tripulación, de la misma nacionalidad de la aerolínea. La Unión Europea tiene vetado el acceso a su territorio de las aerolíneas nepalíes desde 2013, cuando aseguró que la situación en materia de seguridad de esas compañías no dejaba otra opción que prohibir sus operaciones.