La Policía de Camboya detuvo ayer al español Artur Segarra, principal sospechoso del asesinato del empresario catalán David Bernat, cuyo cadáver apareció hace una semana en el río que cruza Bangkok. "Lo tenemos", dijo por teléfono un oficial camboyano. El arresto tuvo lugar en el bar de un hotel en Sihanoukville, al sur del país, sobre las 19:30 hora local.

Segarra, de 37 años y natural de Cataluña, huyó el pasado viernes al ser identificado por un grupo de camareros cuando estaba cenando en la provincia de Surin (Tailandia), que colinda con Camboya.

El vehículo de huida, una motocicleta roja de la marca Honda, fue hallado cerca de la frontera el sábado. Su entrada a Camboya habría sido de forma ilegal, motivo por el cual será expulsado al último país de procedencia, Tailandia.

El general de la Policía Panya Mamen, jefe de la investigación criminal, apuntó el viernes que Segarra está involucrado "en alguna etapa o quizás en todas" del asesinato del catalán David Bernat, que fue visto por última vez con vida el pasado 20 de enero en Bangkok, en compañía de otro extranjero.

Los primeros restos del cuerpo de Bernat, desmembrado en siete partes, fueron hallados el pasado día 30 en el río Chao Phraya, que atraviesa Bangkok, y desde entonces han aparecido más diseminados en el agua.

Según la investigación forense, Bernat, de unos 40 años y natural de la provincia catalana de Lérida, pereció por asfixia entre el 25 y el 27 de enero tras ser torturado.

La Policía tailandesa, tras cotejar información y pruebas con la embajada de España en Bangkok, detalló el jueves que los datos del desaparecido coincidían con los del cadáver encontrado.

A mediodía de ayer, las autoridades de Tailandia aún no habían emitido una orden de arresto contra Segarra por supuesto asesinato, pero sí por infringir las leyes de inmigración al haber estado en el país con un visado caducado desde mediados de diciembre.

El móvil del macabro crimen apunta hacia un secuestro y extorsión con el objetivo de lograr acceso a las cuentas bancarias de la víctima. La Policía ha detectado "movimientos de grandes cantidades de dinero" desde las cuentas corrientes en Singapur del español asesinado hacia entidades bancarias en España y Tailandia, entre las que se encontraría la cuenta de Artur Segarra. Las autoridades creen que "hay muchas personas involucradas", extranjeros y locales.