El fuego sigue siendo un peligro para la península ibérica. Por ello, el Gobierno ha decidido aumenta la alerta por incendios forestales para el domingo y ha extendido el riesgo meteorológico a un total de trece comunidades autónomas. Ante esta situación, el Ministerio del Interior apela a la colaboración ciudadana como principal medida de prevención. Pero el calor tampoco da tregua y ha obligado a decretar la alerta amarilla en varias provincias. La comunidad más afectada es Andalucía, donde podrían llegarse a los 41 grados en Sevilla y Córdoba. 

Según las previsiones de la Dirección General de Protección Civil y Emergencias, el riesgo de incendios alcanzará "niveles muy elevados" en Castilla y León, en el sureste de Galicia, en Vitoria, en Navarra, en el oeste de la Rioja, en Madrid, en Guadalajara, en Cuenca, en el sur de Teruel, en Castellón, en el sur de Albacete, en Toledo, en Cáceres, en Badajoz, en Cádiz, en el este de Sevilla, en Córdoba, en Málaga, en Murcia y en algunos puntos de Barcelona y de Gerona.  

Mientras aumenta el riesgo por incendio forestales, los medios del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino continúan actuando en la extinción de incendios en colaboración con las comunidades afectadas por el fuego. Concretamente, en el incendio declarado en un paraje de Tarifa (Cádiz) está colaborando un helicóptero bombardero y en Moral de Sayago (Zamora) un BRIF/A con dos helicópteros dotados con helibalde. 

Además, el pasado viernes colaboraron en la extinción de 7 incendios en 6 provincias con 3 aviones de carga en tierra, 1 BRIF/B , 3 helicópteros bombardero y  1 avión de coordinación y observación y 1 unidad móvil de meteorología y transmisiones. Los medios aéreos realizaron 22 horas de vuelo. A esta ayuda hay que añadir la prestada por la Unidad Militar de Emergencias (UME) del Ministerio de Defensa, que está actuando en todos aquellos incendios de Nivel 2 en que las Comunidades Autónomas han solicitado su intervención, por medio de la Dirección General de Protección Civil y Emergencias del Ministerio del Interior. 

A media tarde del día de ayer, finalizaba la intervención y el repliegue a sus bases de origen de los efectivos militares de los batallones I (Madrid) y IV (Zaragoza), que han colaborado en la extinción del incendio forestal habido en el campo de maniobras de San Gregorio (Zaragoza). Este incendio, que comenzó el pasado martes, ya está controlado pero se necesitarán unos días para poder extinguirlo por completo, según fuentes del Gobierno de Aragón.

Ante esta situación, el Gobierno recordó que las medidas de prevención y la colaboración ciudadana son esenciales para evitar fuegos. Por ello, recomendó extremar las precauciones y prestar especial atención a las normas de cada autonomía sobre prevención de incendios.   En caso de incendio, recomendó adentrarse en zonas de monte o bosque sólo si conoce bien el terreno, las vías de comunicación y caminos, caminar siempre por zonas de gran visibilidad, y acampar en zonas autorizadas, puesto que éstas cuentan con medidas de protección frente a un posible incendio y es más fácil la evacuación. 

Por último, aconsejó informarse de la situación meteorológica si se va a viajar y, en caso de detectar un fuego en su inicio, pisotear o sacudir con ramas verdes la base de las primeras llamas y, si en un tiempo breve no puede apagarlo, avisar a alguno de los servicios de emergencia.

Mientras el calor tampoco da un descanso a los ciudadanos. De hecho, varias comunidades españolas se encuentran en alerta amarilla por altas temperaturas. Y es que la Agencia Estatal de Meteorología ha activado este color en Extremadura, Castilla-La Mancha, Madrid, Murcia, Baleares y varias provincias andaluzas, que se suman a la alerta naranja de Sevilla y Córdoba.  

Concretamente Andalucía es una de las comunidades que se está llevando la peor parte en esta nueva ola de calor. Y es que en las campiñas sevillana y cordobesa el termómetro podría alcanzar los 41 grados. Ante este incremento de las altas temperaturas, se recomienda a la población seguir sencillas medidas preventivas de hidratación y alimentación, así como evitar la exposición al sol en las horas centrales del día, especialmente en ancianos, niños y enfermos crónicos.