Los operadores audiovisuales españoles, en abierto y de pago, a nivel nacional invirtieron en 2017 un total de 410,2 millones de euros en obra audiovisual europea, lo que supone un aumento del 52,41% con respecto al año anterior (269,12 millones de euros), triplicándose la cifra de inversión exigida, que ascendía a 133,46 millones de euros. Este aumento se debe sobre todo a la producción de series, en especial la irrupción de canteras de producción a cargo de firmas como Movistar + o Neflix.

Estos datos lo aporta la Comisión Nacional de Mercados y Competencia (CNMC), que ha publicado el informe sobre el cumplimiento de la obligación de financiar obra audiovisual europea. En el ejercicio se ha supervisado a 22 prestadores, incluidas las cadenas autonómicas.

El significativo aumento de la inversión conjunta obedece al aumento de la inversión en series. En 2017 la cantidad en series en lenguas oficiales en España creció en más de un 40% respecto al año anterior. De manera conjunta, la proporción de inversiones en series en lenguas españolas y extranjeras, abarca el 77% del conjunto de la inversión total. En relación con la inversión en películas cinematográficas, la CNMC ha detallado que los canales destinaron 84 millones de euros, cifra que “no dista mucho de la obligación que tienen los prestadores en base a sus ingresos”, que asciende a 74 millones de euros.

El 90% de la obligación de financiación anticipada de obra europea se concentra en cuatro grandes grupos: Atresmedia, Mediaset, RTVE y Telefónica. El resto, 16 agentes, soportan el 10% restante de la obligación

Las inversiones en series, fueron aumentando su porcentaje en los últimos años, alcanzando en 2016 y 2017 máximos históricos, cifras que serán aún mayores en 2018 y 2019 con la presencia de más competencia. Por el contrario, el porcentaje de inversión en cine ha disminuido, con 53,1% del total para series y un 24,8% para series extranjeras; y sólo el 19% para películas.