Salvador Cortés. Matador de toros

"Ha sido una de las tardes más importantes de mi carrera por la entrega que he tenido"

-¿Qué ha marcado su actuación?

-Fundamentalmente destacaría mis ganas de superación. Ha sido una de las tardes más importantes de mi carrera por la entrega que he tenido en todo momento. Con cosas fuertes, como resolver con toros muy distintos, con capacidad para afrontar las ganaderías, diferentes, y creo que también se ha visto que estaba preparado para todo ello.

-¿Cree que ha estado mejor que en su encerrona en Sevilla, cuando salió a hombros?

-Hoy, aunque en esta última etapa no he contado con contratos y apenas he toreado, me he visto igual. Todo ha sido porque tenía mucha fe. Ha sido una apuesta fuerte por mi carrera y lo he vivido así, con seis toros de una seriedad importante.

-¿Cómo evalúa lo que ha realizado?

-Me han salido las cosas como quería. Me he visto muy solvente y eso que no ha sido fácil. He logrado lo que buscaba. Creo que todo el mundo estaba encantado.

-¿Qué repercusión cree que tendrá de cara a lo que buscaba, que le llamen los empresarios?

-No lo sé. Por lo menos, me ha servido a mí para tener mayor moral, también para los partidarios que me siguen y para mi familia. Yo creo que cuando se hacen las cosas bien, todo sirve. Éste ha sido un planteamiento ambicioso y he salido a hombros, por lo que creo que será muy positivo de cara a que cuenten nuevamente conmigo.

-Su primer objetivo es que cuenten con usted para la Feria de Abril. ¿Le ha llamado la empresa de Sevilla?

-No. Lamentablemente no me ha llamado. Tengo la esperanza de que pueda entrar en los carteles porque ese es uno de mis principales objetivos, poder torear nuevamente en la plaza de Sevilla.

-Desde su punto de vista, ¿qué ha sido lo más destacable?

-Sobre todo, la superación tanto física como psicológica.

-Lo peor.

-Ahora tengo el dedo gordo de la mano derecha como una pelota por el porrazo que me ha dado un toro, al comienzo de la corrida, cuando daba un derechazo. He tenido que vendarme la mano y ahora me duele. Pero no quiero echar cuentas a esto, no ha sido nada.

-Aun así, ha banderilleado al tercer toro.

-Sí. Yo de novillero solía prender banderillas. En esta ocasión me ha costado por el dolor en la mano. Pero me he visto bien. Sobre todo en el segundo par y en el tercero, que han sido los que me han salido más reunidos.

-Vayamos con el análisis de los toros.

-El primero, de Parladé, tenía un problema de vista; en corto, me ha respetado. El segundo, de Partido de Resina, mansote, ha acusado el desembarque. El tercero, de Luis Albarrán, ha sido bueno, noble. Por el pitón izquierdo le ha faltado más profundidad. El cuarto, el de Victorino Martín, no tenía un pase por el derecho; en cambio, por la izquierda, le he podido dar buenos pases. El quinto, de Javier Molina, tenía muchísima calidad, pero se ha rajado; le he dado pases buenos. El sexto, de Los Recitales, se ha dejado. Era un tío y lo he matado bien. Y el sobrero, también de Los Recitales, ha sido el peor.

-¿Cómo se encuentra ahora, después de la batalla?

-Físicamente no estoy cansado y psicológicamente tampoco. Quería dar un aldabonazo. Me he ido a chiqueros, he banderilleado y con la espada he estado bien, salvo el pinchazo al toro jabonero.

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