La pantallas de Puerto Sherry, una de las zonas con más aforo del puerto deportivo -sólo disponible para ocasiones muy especiales-, se quedó pequeña el martes por la noche durante la celebración del Puro Latino Fest, el primer festival de música latina internacional que se celebró en El Puerto. Desde julio, mes en el que se celebró su presentación, el evento ya apuntaba a maneras y prometía convertirse en el concierto del verano en Andalucía. ¡Y vaya si lo fue! En total, según datos de la organización, 9.873 personas acudieron al concierto donde se anunciaban un total de 14 artistas entre los que destacaban, por sí solos, el nombre de dos de ellos: Daddy Yankee y Juan Magán. Del cartel a última hora se cayó J.Balvin tras cancelar su gira por España. Ojito. Que este festival para ser la primera vez que se celebraba venía fuerte.

La lanzadera de autobuses evitó la formación de atascos y aglomeraciones

El evento comenzó a las 18:00 horas con la apertura de puertas. A esa hora en la zona ya se podía ver a un gran número de personas que habían decidido comenzar la fiesta por su cuenta mucho antes. Nada de aglomeraciones. Y tampoco atascos. La lanzadera de autobuses y trenes turísticos que la organización instaló desde la plaza de toros fue todo un acierto y, aunque evidentemente el tráfico era lento, no fue para nada complicado ni imposible acceder hasta la zona. Eso sí. El tema del aparcamiento ya era otra cosa. La tarde fue poco a poco de menos a más. Lógico. Había que guardar fuerzas para Daddy Yankee. Mientras el puertorriqueño se hacía esperar por el escenario pasaron distintos artistas ya consolidados y otros emergentes, como los hermanos Moreno (conocidos tras su paso por el programa de la Voz), Álvaro Guerra y José Peibol y Alex Aviño.

La cosa se comenzó a desmadrar un poco más a las 21:30 de la noche, cuando Juan Magán pisó el escenario. Con Usted, la primera de las canciones, el público se vino arriba inmediatamente. No hizo falta mucho para prender la mecha. El ambiente ya estaba calentito. Poco antes de las 23:00 horas de la noche, con una puntualidad extraordinaria, Daddy Yankee terminó por hacer vibrar Puerto Sherry. Con las notas de Rompe, una de las canciones más conocidas del artista, el puertorriqueño apareció en el escenario junto a su grupo de baile - que, todo hay que decirlo, bailaban para reventar de bien-. La puesta en escena fue espectacular: fuego, serpentinas al aire, cohetes, bengalas... El flechazo con el público fue instantáneo y la conexión se mantuvo durante toda la actuación. Incluso durante alguna que otra canción el cantante soltó el micrófono y el resto lo hizo el público. Esa noche Yankee ponía fin a su gira Dura. El cantante tenía ganas de pasarlo bien, se le notaba. Entre el público asomaba alguna que otra bandera de su país agitada por sus paisanos. No les faltó ni el saludo ni unas palabras de agradecimiento desde el escenario por su parte. Antes de ayer Yakee confesó que se sentía como en casa y que le gustaba Cádiz. Por aquí nos hemos quedado con ganas de volverlo a ver.