La emperatriz Joséphine de Bonaparte es de nuevo protagonista de la colección de relojes lanzada por la marca Chaumet. Figura representativa de la moda y gran coleccionista de joyas, sigue sirviendo de inspiración actualmente para la compañía.

Bajo el nombre Joséphine, la firma francesa combina el arte de la línea y el virtuosismo, basándose en las creaciones de la Maison, muy del gusto de la noble. Mujer conocida por acentuar su figura y vestuario con piezas elegantes y únicas, los relojes inspirados en su figura no son una excepción. 

La base del diseño de la colección se inspira en el tesoro encargado en 1811 por la emperatriz para su nuera, lo que significó el preludio de lo que serían los relojes de pulsera.La gran emperatriz fue la primera gran clienta de la Maison Chaumet. Muestra de ello es la combinación única que ha realizado la marca, uniendo las joyas de Joséphine Aigrette y Joséphine Ronde d´Aigrettes.

El reloj joya Joséphine Aigrette quiere escenificar la virtud y la importancia que la firma impregna en sus diseños. En oro blanco o rosa, pavé o no, este reloj cuenta con varias versiones según la ocasión. Para el día se cuenta con una correa de cuero mientras que para la noche la Maison ofrece un modelo satinado. La esfera está disponible en colores blanco y negro. También incluye el motivo de la pera en un índice engastado con un diamante de talla brillante, que a la vez adorna la esfera gráfica.

La Maison Chaumet ha estado desde sus orígenes en 1780 en París muy ligada a la emperatriz Joséphine, trasmitiéndose su experiencia de generación en generación. En el corazón de la Place Vêndome tiene lugar la creación de joyas y relojes con todo el color, la elegancia y el sabor de la capital francesa, así como de su historia.