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Esta enfermedad, consecuencia de la menopausia, afecta al 36% de las mujeres

Mujer recibiendo un tratamiento de pérdida de cabello en una clínica.

Mujer recibiendo un tratamiento de pérdida de cabello en una clínica. / Freepik

Sudores nocturnos, sequedad vaginal, sofocos, dolor en las relaciones sexuales o menstruación irregular. Son algunos de los síntomas que te están indicando que estás llegando a la menopausia, una etapa que suele darse entre el género femenino de entre 45 y 55 años, respectivamente. Pero, ¿habías pensado alguna vez que la caída del cabello puede ser una consecuencia de esta etapa? 

Se llama alopecia androgénica y se caracteriza por un adelgazamiento progresivo del cabello que, según la Clínica Universidad de Navarra, termina en una pérdida de unos 100 cabellos al día. También le sucede a un 63% del género masculino, pero ¿a qué se debe esta "calvicie" que afecta a un 36% de las mujeres cuando llegan a esta etapa?

Causas de la alopecia androgénica

Por un lado, puede deberse a una predisposición genética ya que si la persona tiene familiares con antecedentes de calvicie, lo más probable es que la mujer cuando llegue a la etapa de la menopausia presente la alopecia androgénica como una de las consecuencias. 

Por otro lado, la respuesta está en las hormonas androgénicas en la que los andrógenos juegan un papel bastante importante. La dihidrotestosterona se deriva de la testosterona y tiene un efecto negativo en los folículos pilosos susceptibles, contribuyendo a la reducción de su tamaño y acortando el ciclo de crecimiento del cabello. En este sentido, lo que le sucede a las mujeres es que el cabello va adelgazando por la parte superior del cuero cabelludo, manteniendo la línea frontal del cabello. 

Aunque el estado de calvicie sea palpable a la vista, la mujer necesita un diagnóstico definitivo a través de pruebas como la evaluación de antecedentes familiares de calvicie, observación del patrón de pérdida de cabello hasta la posibilidad de realizar un análisis de sangre con los que descartar otras posibles causas por las que se puede producir la pérdida de cabello, como pueden ser trastornos tiroideos o deficiencias nutricionales.

Alternativas de tratamiento

La alopecia androgénica es una situación que se va dando de manera progresiva, lo que significa que la pérdida de cabello puede continuar con el tiempo. En este sentido, el doctor Agustín España, director del departamento de dermatología de la Clínica Universidad de Navarra, recomienda observar si esa pérdida es brusca o crónica, es decir, se prolonga en el tiempo. 

Por eso, es determinante tener la certeza del origen del problema y las causas que lo originan. A partir de ahí, el dermatólogo puede prescribir el tratamiento adecuado con el que poder ralentizar la progresión y, en algunos casos, estimular el crecimiento del cabello. Hay diferentes alternativas de tratamiento:

  • Medicamentos tópicos como el minoxidil que es un vasodilatador tópico que se aplica en el cuero cabelludo para estimular el crecimiento del cabello. Es eficaz tanto en hombres como en mujeres.
  • Medicamentos orales. Se puede aplicar espironolactona que tiene propiedades antiandrogénicas para la mujer.
  • Tratamientos quirúrgicos en el cual se realiza un trasplante de cabello. Este tratamiento consiste en la transferencia de folículos pilosos procedentes de algunas zonas más resistentes a la dihidrotestosterona, como es la parte posterior del cuero cabelludo, hacia las zonas afectadas por la calvicie.
  • Terapias adyuvantes. Pueden emplearse dos métodos. Por un lado, la terapia con láser de baja intensidad con la que se puede mejorar la densidad del cabello y por otro, la micropigmentación capilar que es un tatuaje que crea la apariencia de un cabello más denso.
  • Cambio en el estilo de vida y cuidados del cabello a través de una dieta equilibrada y el manejo del estrés pueden contribuir a la salud general del cabello.

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