Antonio Yélamo, director de la cadena Ser en Andalucía

"El oyente ejerce hoy su soberanía"

  • Para celebrar el Día de la Radio, la Cadena Ser contará hoy con los testimonios históricos de grandes voces, como Gabilondo o Luis del Olmo.

Supuso una revolución en la comunicación y ahora, de la mano de las nuevas tecnologías y las redes sociales, está viviendo su segundo momento de gloria. La radio es hoy la protagonista de la jornada y celebra su día en todo el mundo. Para conmemorar esta efemérides, la Cadena Ser incluirá en todos sus programas un guiño a la radio del pasado y contará con los testimonios de grandes voces de ayer y de hoy, como Iñaki Gabilondo o Luis del Olmo, en el programa matinal de Gemma Nierga. Antonio Yélamo, director de la Ser en Andalucía, hace un repaso al papel que juegan las ondas en el siglo XXI.

-Según la Unesco, el día de la Radio es necesario para promover el acceso a la información y la libertad de expresión, pero ¿Y en España? ¿Cuál es el objetivo de esta efemérides?

-También aquí es necesario celebrarlo. Es el mejor homenaje que se le puede hacer a este medio que, a pesar de las dificultades que se observan en estos momentos, sigue teniendo una gran credibilidad para los ciudadanos, según demuestran los sondeos.

-¿Sigue siendo la radio el medio preferido por los españoles para informarse o, por el contrario, existe un giro hacia el entretenimiento, como está sucediendo en las televisiones?

-No. No creo que se tienda hacia el entretenimiento, sino todo lo contrario. En los momentos más críticos es cuando más información en radio se consume. Ya se vio en la guerra de Irak y se está volviendo a ver ahora. Y eso que ahora existen otras vías para informarse. A pesar de ello, la radio sigue siendo la más demandada, quizá por su rigurosidad.

-¿Es de los que piensa que la radio ha cedido en parte el testigo de la inmediatez a las redes sociales?

-No lo creo. Más bien creo que son cómplices. Siempre se ha dicho que la radio es un medio caliente por la conexión y participación entre el emisor y el receptor. Ahora, por tanto, lo es más que nunca. Lo que en principio podía verse como un factor con el que entrar a competir, hoy se ve como un aliado. Si lo sabe aprovechar, la radio tendrá garantizado su futuro.

-En un momento de tanta intensidad informativa como éste ¿Qué es lo más importante a la hora de poner en pie un programa?

-Lo fundamental es no perder nuestro principal capital: la credibilidad y, bajo ese prisma, hacer nuestro trabajo.

-Lleva más de 25 años en la Cadena Ser ¿se parece en algo la radio de sus orígenes a la que está dirigiendo ahora?

-Conocí una radio comprometida con la sociedad y esa característica sigue estando presente hoy día. Aunque hoy es el oyente quien ejerce su soberanía y, lejos de ser un sujeto pasivo, ejerce su opción hacia un determinado programa. La radio de hoy ha sabido adaptarse a los cambios y ha sabido incorporar a todas las capas sociales. En cuanto a las diferencias, quizá cuando empecé lo que no existía era la crisis económica que tanto ha afectado a las radios comerciales y la crisis específica del sector periodístico, pero, por lo demás, sigue intacta la vocación y el compromiso con la realidad. Y a ese compromiso es a lo que siempre me he querido acercar.

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