Blusens Monbus - Cajasol · la crónica

SAR: Su Alteza Real (70-77)

  • Davis se sale en su antiguo hogar y clasifica al Caja a la Copa · La calma da el triunfo en Santiago.

Su Alteza Real Paul Davis volvió a su antiguo hogar, donde estuvo mes y medio para conocer y ser conocido en la ACB, para comerse al Blusens en el Fontes do Sar, la fuente en la que bebió el estadounidense para amargarle la mañana a los gallegos, tan deseosos de un triunfo para salir del bache como los sevillanos para auparse virtualmente a la Copa del Rey. El Cajasol Banca Cívica es sexto en solitario con nueve victorias y es perseguido por una terna que sería la única que podría adelantar a los hispaleses si éstos cayeran por paliza con el Gran Canaria y los tres ganaran por mucho la siguiente jornada. Inviable. El Cajasol estará en el Palau Sant Jordi del 16 al 19 de febrero, cumpliendo uno de los objetivos.

Ruge el Sar, chilla Galicia. La afición santiaguesa es la más forofa de la ACB. El Pionir de Belgrado trasladado a Compostela. En este ambiente de baloncesto puro arrancó con mucho tino y acierto el Cajasol en un encuentro con mucho juego para los dos. El triunfo local le daría un respiro al Blusens después de perder una renta de 20 en Valencia y jugar muy mal contra el Blancos de Rueda aquí; el éxito hispalense lo conduciría directo a la Copa por mucho que las matemáticas no lo confirmaran aún. Era un duelo precioso, apasionante.

La nerviosera afectó en el inicio a los chicos de Moncho Fernández, atenazados por verse cerrando la tabla con dos rivales más que la noche anterior perdieron. Un 0-8 para abrir boca hizo que tuvieran que actuar las gargantas de los seguidores. Aun así, no había forma. Davis entró tras la segunda falta de Triguero y recordó viejos tiempos aquí con un robo y canasta. Palacio era el único que entendía la necesidad de anotar y tiró del carro del Obradoiro para con un triple acercar a cuatro a los suyos. Calloway, Triguero y Tepic, sobre la bocina antes del intermedio, mantuvieron con distancia al Cajasol: 12-21.

Con la voz quebrada seguía animando el abonado santiagués, pagando con los árbitros algunos pasos dudosos o alguna falta interpretada de forma diferente por el hincha y el colegiado. Intentaba dar alas al Obra, pero no había forma. El Cajasol, paciente, dejando cocer el partido lentamente, a su ritmo, no cambiaba el rictus y seguía adelante desde su defensa. Un triple de English y otro de Calloway desde ocho metros enmudecieron el Sar. Continuó la fiesta Davis con un alley oop a la contra y Bogdanovic fintando bajo el aro para anotar con comodidad: 16-33.

Con todo a favor, debutó Sastre esta campaña y se le notó frío, falto de ritmo, pero se le notó ya en cancha. Bien. Palacio prosiguió su monólogo de él contra el mundo, pero de nuevo Davis y luego English colocaron a los cajistas 15 arriba antes de que Ere cerrara el segundo acto: 24-37.

La calma, el saber estar, sin perder el norte nunca, de los sevillanos fue la clave de la segunda parte, amén del gigante Paul Davis, estratosférico con 26 puntos al final de la contienda y una docena de ellos desde el tiro libre.

Limó cuatro puntos en la reanudación el Blusens, aunque pronto se recompuso el equipo de Plaza, que recuperó a un desacertado Guille Rubio con un triple que le devolvió la vida al catalán. Igualó la máxima distancia con 17 puntos y casi medio cuarto con la posibilidad de lanzar tiros libres al estar los locales en bonus muy pronto. Lo desaprovechó salvo una personal sacada al final por Jasen.

Estaba muy controlado el duelo y en ésas falló Davis un mate que metió en el choque a los gallegos. Era el minuto 27 y Corbacho sumó entonces el primero de sus seis triples. Menos mal que el despertar local no mermó la anotación de los visitantes, que demostraron una gran fortaleza mental. Por mucho que el alero se apuntara cuatro triples en tres minutos, los cajistas seguían 10 arriba a falta de otros tantos minutos por celebrar.

Los tiros libres de Davis y los triples de Bogdanovic y English impidieron creer al Obradoiro, pero los santiagueses no se daban por muertos y Corbacho seguía siendo un guerrillero desde el 6,75. Logró seis en su mañana de gloria, pero el Blusens no remontó y el Cajasol, con el monarca Davis guiando el camino, se clasificó para la Copa del Rey por mucho que los números digan que queda un halo matemático que lo evitaría. El Cajasol mereció ganar ayer y merece el premio. No queda tiempo para disfrutar. A pensar en el Gran Canaria.

Ficha técnica:

70 - Blusens Monbus (12+12+23+23): Milt Palacio (11), Javier Bulfoni (7), Ebi Ere (3), Bernard Hopkins (2), Stephane Lasme (9) -cinco inicial-, Andrés Rodríguez (4), Deron Washington (5), Levon Kendall (7), Oriol Junyent (2) y Alberto Corbacho (20).

77 - Cajasol (21+16+21+19): Tomas Satoransky (1), Txemi Urtasun (5), Pancho Jasen (6), Luka Bogdanovic (11), Juan José Triguero (4) -cinco inicial-, Milenko Tepic (4), Earl Calloway (6), Joan Sastre (-), Guille Rubio (3), Carl English (11) y Paul Davis (26).

Arbitros: Pérez Pizarro, Bultó y Cardús. Eliminaron por cinco faltas personales a Stephane Lasme y a Deron Washington.

Incidencias: Partido correspondiente a la decimosexta jornada de la fase regular disputado en el Fontes do Sar ante 4.000 espectadores.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios